Otra vez el Languedoc, esta vez con carrillón y lo que queda de talleres artesanales medievales.
A James Tissot se lo conoce como el pintor de las mujeres. Rescató su belleza, su gracia y su elegancia. También se ajustó mucho a la realidad.
Si pecaste tanto como para que el perdón sea imposible, quizás puedas probar de colarte en el cielo a través de esta puerta abierta en China.
Es el más largo, el más profundo, etc…. pero estoy seguro que, junto con uno en Japón, es el único que se terminó en fecha y que los gastos finales se acompasaron con las previsiones.
Parece un ave de rapiña pero es vegetariano, parece demasiado robusta para volar pero se eleva como un águila, parece un ave de bandada pero es monógamo hasta la muerte.
Hay suficientes documentos como para sostener que ambos estuvieron en la Patagonia y en Chile, quizás en Uruguay, para terminar muertos en Bolivia. Nada heroico ni cinematográfico.