El gran Buda de Leshan
Hasta que no vengas aquí, tendrás una idea muy mezquina acerca del aspecto que tiene una cosa verdaderamente descomunal.
Estiman que tendiendo la mesa en uno de los pies de este Buda, podrían darse un banquete unas cien personas. ¿Y para qué hicieron esta barbaridad de estatua de 71 metros de altura, la más alta del mundo en honor de Sidarta Gautama, un filósofo que jamás hubiera pretendido tanto dispendio y que dijo mil veces que no era dios y que tampoco era un profeta? Hay momentos en la historia que a uno no lo dejan ser humilde.
En fin, ¿cómo harías para tallar una estatua como ésta? Primero tendrías que encontrar un precipicio de cien metros de altura, luego tener paciencia y habilidad inaudita, así como la capacidad de convencer a las autoridades para que te banquen semejante proyecto. Así que, de rebote, necesitás un pretexto, por ejemplo, que solo poniendo un Buda allí, en la confluencia de tres ríos, podrías calmar a la horrible bestia que agita las aguas y hunde a los barcos.
Francamente, hoy no convencerías a nadie y te saltaría encima no solo el Tribunal de Cuentas y la oposición, sino que manifestarían en tu contra hasta los garrapiñeros. ¿Podrías creer que funcionó, que se aquietó el hervidero desde que pusieron al Buda? Pues sí, pero los científicos tienen explicaciones nada espirituales para todas las cosas. El agua se amansó por las piedras sobrantes que los escultores iban tirando al río.
Estatuas eran las de antes. Y si no lo creés preguntale (si es que vive) a Korczak Ziolkowski, quien en 1948 inició lo que iba a ser la estatua más alta del mundo (172 metros, un poco más y es el doble) y hoy tantos años después, la obra todavía está en veremos. La foto que publicamos es la maqueta puesta delante de la montaña que todavía está por tallarse. Vos ya estarás pensando en el Cristo Redentor y otras cosas, pero si empezamos con las comparaciones, no la terminamos más. Esta es la estatuta de Buda más alta del mundo y seacabó.
Visto desde el mar
A esta estatua, o más bien a este parque ya consagrado como Patrimonio de la Humanidad, se puede llegar en barco desde la próxima ciudad de Leshan, que se avizora en la niebla en algunas fotografías. Solo hay que recorrer los turbulentos ríos Min Jiäng, Dadu y Qingyi, que allí confluyen y apearse en uno de los muelles, o no apearse nada y mirar de lejos.
Porque si bajás, deberías trepar los 250 escalones que te llevan hasta la altura de la cabeza del colosal Buda. Pero si te lo tomás en serio, si querés sentir un poco lo que está experimentando toda esa gente oriental que va contigo (poquísimos occidentales), te convendría el trayecto a pie, casi tres días, por un parque alucinante en una de las montañas sagradas, por senderos que te llevarán a templos y puentes impresionantes, sin contar con gigantescos animales mitológicos también tallados en roca.
En fin, que solo veo tres explicaciones para que este lugar no sea un éxito turístico para occidentales, aunque es impresionante la cantidad de orientales que concurren. Una de esas explicaciones es que por aquí no hay un casino ni tiendas de marca, solo hay asquerosa espiritualidad. Otra son los 250 tremebundos escalones que desafían al vértigo. Y la tercera es la comida china picante común en esta región, dicen que pìca y pica; que estos tipos son capaces de masticarse uno de nuestros ajíes de la mala palabra y continuar sonriendo como si nada.
El Buda fue construido entre los años 713 y 803, durante la dinastía Tang, en el monte Lingyun, cercano a la ciudad de Leshan, en la provincia de Sichuan. Sus hombros miden 28 metros, la cabeza tiene 10 metros de ancho y el peinado luce 1.021 “bucles”. Las orejas se estiran hasta 6,2 metros y el dedo anular, que no hace el gesto para el cual lo usamos nosotros cuando no estamos casándonos, tiene nada menos que 8,3 metros de largo. En el tránsito dejarías patitieso a más de un camionero prepotente. Los pies, que te asombrarán en las fotos, tienen 11 metros de largo y 8,5 de ancho. Para darte una idea, 12 metros es el ancho habitual de un solar en las manzanas de Montevideo.
Todo se debe al monje budista llamado Haitong. Dice la historia y quizás la fantasía, que en determinado momento sus argumentos para que se realizara semejante esfuerzo dejaron de ser convincentes y que entonces, para lograr atención, se pinchó los ojos. Suena rarito, pero cosas más crueles y extravagantes muestra la historia real. De cualquier manera, apenas murió el sacerdote, la obra quedó paralizada hasta que, 71 años después, coincidiendo con la altura del monumento, los discípulos de Haitong lograron que el gobernador destinara fondos para terminarlo en el año 803.
El monte Emei, al que pertenece la elevación de Lingyun, es una de las cuatro montañas sagradas de China, siendo la más alta de todas ellas con más de tres mil metros de altura. Así lo explican en http://www.china-family-adventure.com/es-buda-de-leshan.html#.UzHSXPl5Pto , fuente que ahora cito textualmente: “La montaña sagrada alberga setenta y seis templos y monasterios budistas ubicados cerca de la cima, construídos en su mayor parte durante las dinastías Ming y Qing”.
“Entre las verdes masas forestales surgen los numerosos templos y pabellones construidos por los monjes y ascetas que acudieron a este lugar, elegido por el Bodhisattva de la virtud universal, Samantabhadra, conocido como Puxian en China. Con un estilo arquitectónico flexible que se adapta al paisaje, nos encontramos con jardines, hermosas esculturas y escalinatas que recorren sus laderas. Algunos de estos templos están edificados sobre terrazas a diferentes niveles, mientras que otros, como las estructuras de Leiyinsi, se alzan sobre pilares asentados sobre el inclinado terreno”.
(…) “Aunque es posible tomar un teleférico hasta la Cumbre de Oro, los peregrinos más devotos realizan la ascensión a pie, con un recorrido aproximado de sesenta kilómetros, dedicando al menos tres días a la montaña. La ascensión comienza en el Monasterio Baoguosi, fundado en el siglo VI, constituyendo el más importante de los templos del monte Emei, donde destaca la gran estatua del Buda Amitabha elaborada en porcelana. Continuando el ascenso el visitante se encuentra con el Monasterio Fuhusi, que cuenta con tres pabellones para el culto budista.”
“Tras una larga ascensión se puede disfrutar de la belleza del Pabellón Qingyin, ceñido por verdes acantilados y ubicado entre dos arroyos, el Dragón Negro y el Dragón Blanco. Perseverando con su ascenso, los peregrinos acceden a la Gruta Bailongtong y el Monasterio Wannian, el primer templo construido en la montaña, junto al cual se encuentra la enorme estatua dorada del bodhisattva Samantabhadra, protector de la montaña, con sus setenta toneladas de bronce fundidas en siglo X.”
Ahora, caete de espaldas: originalmente el Buda estaba enchapado en oro y cubierto en una estructura techada para protegerlo de la inclemencia, pero cuando invadieron los mogoles, todo el sagrado lugar fue saqueado salvajemente. Pero estaba tan bien construido, o tan bien protegido por los que mandan más allá de la voluntad humana, que su integridad nunca estuvo en riesgo, ni siquiera cuando anduvieron por allí los salvajes que portaban el “Libro Rojo de Mao” y matando a cualquiera que pudiera parecer intelectual. Antes de concluir que es indestructible, habría que someterla a la acción de nuestros hinchas de fútbol, cuando se combinan con la pasión depredadora de las fuerzas que vienen a reprimirlos.
¡¿Qué son 1.300 años cuando los enfrentás a un salvajismo como ese, que pudo asustar y detener a los mogoles con mucho más eficiencia que la otra cosa descomunal que es la Gran Muralla!?
Y como última reflexión, te diré que estuve a punto de decir que el agnosticismo tendrá lo suyo, pero no es capaz de abordar obras tan descomunales… cuando de golpe se me apareció la imagen de nuestro Palacio Legislativo, inspirado por gentes de todos los credos o ninguno de ellos, lo que, a mi manera de ver lo hace casi tan grande como esta gigantesca cosa.
¿Que tanta gente caminándole por encima va a terminar por arruinarlo? Y, si, razón de más para ir a verlo cuanto antes. De paso, leé algo sobre Buda que no te va a hacer daño, quizás hasta mejore tu margen de tolerancia con quienes piensan o son diferentes. Abajo te pongo un hipervínculo.
http://www.blogodisea.com/2012/el-gran-buda-de-leshan-en-china/arquitectura-construcciones/
http://es.wikipedia.org/wiki/Buda_Gautama
Guillermo Pérez Rossel