Nuestros hermanos menores
Hay unos 200 millones de insectos por cada ser humano
Hacete a la idea que este mundo no es nuestro sino de ellos y si no lo creés, mirá detenidamente a tu alrededor, usá también una lupa: comprobarás que estamos rodeados, que más nos vale aprender a convivir con ellos y comprenderlos un poco mejor.
En eso nos puede ayudar Donald Jusa, un fotógrafo y geógrafo que vive en Bandung, Indonesia y se ha especializado en tomar estos increíbles retratos de nuestros compañeros de ruta en la inquietante senda de la evolución. ¿Desde cuándo están los insectos en el planeta? ¿Son anteriores o posteriores a las plantas y los animales? Mejor no lo preguntes, parece como que a nadie le interesa, pero lo que ocurre es que casi nadie se anima a arriesgar una teoría. Además, mejor llamémoslos artrópodos, porque si no, dejamos fuera a las arañas, los crustáceos y los miriápodos.
Creéme que son viejísimos y que si no dejan tantos rastros como las otras especies, eso ocurre porque no se petrifican como algunos árboles y como los huesos de muchos animales. Y que, o bien permanecen sin evolucionar durante millones de años o mutan de manera vertiginosa sin que nos demos cuenta, casi como ocurre con algunos virus, como el de la gripe.
Donald tiene 32 años y trabaja como geólogo en una compañía minera, eso es lo que revela su críptica web http://500px.com/djusa, donde casi no hace referencia a su persona, aunque las fotografías hablan por él y lo muestran con un estilo muy aventurero y muy paternal, según el caso. Dice que encontró a los insectos muy cerca de su lugar de trabajo y que cuando se aburrió de los domésticos, salió al bosque donde trabaja como geólogo y encontró muchos más.
Si su propósito es retratarlos a todos, tiene tarea para rato. Dice la Wikipedia que hay aproximadamente un millón de especies descritas y con eso ya supera a todos los otros grupos de animales juntos… pero se estima que puede haber otros 30 millones de especies no descritas. De manera que, siempre según esa fuente, los insectos representarían más del 90% de las formas de vida que comparten con nosotros esta delgada e inestable biósfera.
Y me guardo alguna reserva en cuanto al predominio, cuando me pregunto cuántas “especies” de microorganismos, bacterias, virus y otras porquerías viven al costado, encima o adentro de nosotros, de los vegetales y de los insectos. Son tan criaturas como nosotros, pero no tienen a un fotógrafo como Donald Jusa.
Antes de aterrorizarte y agarrar la escoba, pensá que la inmensa mayoría de ellos son benéficos y que si te ponés a discriminar por el daño que causan, los que salimos perdiendo somos los humanos.
Según su web, el autor de estas fotografías usa habitualmente una máquina Nikon D90 con un lente Nikkon 50 mm F 1.8, nada extraordinario y nada extremadamente caro como para privarse de salir a fotografiar bichos o a retratar al maldito que no nos dejó dormir en toda la noche antes de darle su merecido. Te advertimos que el secreto de estas fotografías no está en el equipo, sino más bien en la paciencia, el pulso y la habilidad para aprovechar la iluminación o crearla. Además, cuando fotografías algo a menos de cinco centímetros de distancia, el «macro» te provee el foco, pero si no dejás de respirar durante la toma, arruinás la fotografía. Lo de Donald es un arte y por eso maravilla.
Mirales las caras en las fotos que Donald colgó en Facebook con la url http://www.facebook.com/pages/DJusa-Photography/288007881256749. A pesar de lo detallado, están todas en baja resolución y así reproducimos las que él ofrece, no solo para halagar legítimamente su orgullo, sino también para que se las compren.
Si te sacudís ese temor ancestral que seguramente desesperó a nuestros abuelos cromagnones, verás que muchos de esos insectos no son aterradores mirados de cerca, también son bellísimos. Por algo la Naturaleza los hizo tan lindos, quizás está tratando de resolver entre ellos y nosotros, aerolito mediante.