Ya sé que si te sacás el 5 de Oro, podrías tener otras opciones. Pero en tren de excentricidades, ésta sería el colmo. Es una pichincha por 300.000 euros.

(Dedicado a mi compañero de liceo Mario España, que vive bastante cerca de todo esto y podría pedir una rebajita)

Si al lector le da por la cholulez, con esta compra tendría titulares  en muchos diarios y revistas de nuestro mundo cercano (en Europa no sería noticia),  pero dudo que le vendan la iglesia si le descubren inclinaciones fanfarroneras; esto es para otra clase de gente, como una pareja de españoles residentes en Bélgica a quienes no se les ocurriría poner allí una sala de maquinitas o alguna otra barbaridad. Además,  esto que puede parecer estrambótico en Uruguay, no lo es donde hay construcciones medievales por todas partes. De hecho, hasta que se concrete el negocio, la iglesia le pertenece a una familia Hernández y los españoles de Bélgica firmaron el compromiso, pero todavía no escrituraron. Podés intentar, pero te debo confesar que los aspirantes actuales la tienen casi ganada.

¿300.000 euros? ¡Pero eso es mucho menos de lo que valen las mansiones en Punta del Este, hermosas, pero vacías de historia! Lo que pasa es que Europa la Iglesia francamente no la está pasando bien y mientras acá el agnosticismo golpeó fuerte hasta mediados del siglo XX, allá parece que recién está llegando.  En Alemania están cerrando iglesias a troche y moche por falta de fieles y las autoridades religiosas estiman que serán como 700 las construcciones que perderán su condición de templo y pasarán a integrar la oferta inmobiliaria. Es el mejor momento de la historia para comprarte una iglesia, un castillo, un monasterio o al menos una torre-atalaya con vista al mar, para ver si hay moros en la costa.  De hecho encontré una de esas torres, por 21.101 euros en el sitio web (http://www.joyasinmobiliarias.com)  ¡más barato que un Fiat Palio con todos los chirimbolos!

Andá mirando cómo va a quedar… Es barata, pero tendrás que gastar bastante.

Es verdad que en general (y en particular en este caso), los bienes están bastante deteriorados y que todos ellos casi sin excepción, están alcanzados por leyes que protegen la construcción por sus valores históricos, arquitectónicos o religiosos. De manera que no podés hacer con ellos lo que se te antoje, sino lo que te autoricen. Mirá lo que le pasó a Piria con la preciosa iglesia que construyó en la entrada a Piriápolis, por el camino de su trencito desde Pan de Azúcar. Le quedó lindísima… pero las jerarquías católicas  nunca le mandaron un párroco; así que su único habitante (lo comprobé hace años, puede que se haya ido) es un gigantesco lechuzón que anida en el campanario. Hay otra, bastante semejante, en el cercano balneario de Laguna del Sauce, casi frente a La Capuera,  desconozco su historia pero también tuve el honor de conocer su lechuzón. Porque no hay campanario completo sin una de estas impresionantes aves que por algo simbolizaban a Palas Atenea.

Te tengo que confesar que el pueblito de Villalba de los Alcores (Valladolid) desbordante de hechos históricos y próspero en algún momento, hoy continúa despoblándose hasta el punto de que solo cuenta con 404 habitantes según el último censo. Hay poco trabajo en la zona, a pesar de que fabrican hermosos muebles.

Según el diario El Norte de Castilla, la iglesia de Santa María del Temple, conocida como “La Cilla” ha sido almacén de granos, teatro y salón de baile.  Es una iglesia románica, cisterciense, “cubierta con bóveda de cañón apuntado, ábside semicircular y una sola nave”, y lo pongo entre comillas para que no creas que presumo saber qué significan todas esas cosas.

Sea como sea, es una joya románica y si vale lo que vale, eso es porque no se puede hacer con ella cualquier cosa, por más que antes tuvo esos destinos tan pedestres como el de salón de baile. Dejó de ser lugar de culto hace mucho tiempo: en 1935 la familia Hernández tradicional de la zona, se la compró a un terrateniente. Si se concreta la venta, cosa casi segura, el matrimonio belga oo transformaría en un taller de pintura y sala de exposiciones, que será privado… pero abierto a visitas como prefieren las autoridades que cuidan estos bienes patrimoniales.

El arquitecto a cargo de la obra de refacción, considera que lo más urgente es la reparación de los techos, que ponen en riesgo la estructura. Luego habrá que consolidar la espadaña (la construcción elevada que con frecuencia alberga al campanario). Ya consolidado el edificio, piensan derribar una pared interior que no formaba parte de la construcción original.

Pese a figurar como propiedad privada, en el templo se celebraron cultos hasta 1972. Dice el diario local, que para “ el Ayuntamiento de Villalba de los Alcores, encabezado ahora por su alcalde, Manuel Gutiérrez, la adquisición de la iglesia por parte de este matrimonio es una buena noticia, porque se supone que se invertirá en conservar el patrimonio. De otra forma, si no se arreglaba, al final iba a acabar destruyéndose.

El pueblito en sí es un poema y pensá que si una iglesia templaria vale 300.000 euros, una casa familiar debe costar dos vintenes… aunque casi todas ellas tienen tantos siglos encima como los monumentos. Si no te da por la presencia mediática y las luces de la gran ciudad, me parece que para muchos sería muy placentero vivir en un pueblito como éste.

Vos que tenés los 300.000 euros te habrás quedado pensando qué harías en Villalba de los Alcores luego de haberte cansado de recorrer piedra por piedra tu imponente posesión. Bué, podrías traer a todos tus amigotes, darles armaduras templarias y salir a recorrer las calles en busca de herejes para degollar. O mejor, ya que te conozco, te conseguís un cura que armonice con nuestro Papa latinoamericano Francisco, tan conciliador, y todos juntos piden perdón por las tropelías que cometieron los cristianos contra moros y judíos. Con un poco de suerte, el mensaje le llega a estos pésimos musulmanes de hoy que si los agarra Alá, le dice a Mahoma que los lleve a todos al peor de los infiernos, donde se encontrarán con algunos de estos cruzados, con los nazis que gobernaron los campos de concentración, con los comisarios del archipiélago Gulag de Stalin y con los que, sacudiendo el libro rojo de Mao, denunciaban a sus padres y mataban a los que sabían leer. Francamente, el mundo no tiene que ser tan horrible.

En fin, que fuera de esta locura mía, hay muchas cosas para hacer en los alrededores, donde hacen vinos y quesos que te dan vuelta los ojos. Y, además  de esta iglesia, en el pueblito hay un castillo erigido entre los siglos XII y XIII. También está la iglesia de Santiago Apóstol una belleza románica, el Monasterio de Santa María de Matallana, del Siglo XII también románico-cisterciense y tan monumento histórico como todo lo demás. En este último lugar, funciona un Centro de Interpretación de la Naturaleza Matallana. Y como también hay un Museo de la Carpintería, el pueblito viene evolucionando como un precioso museo in vitro.  A nosotros nos falta historia y ellos ya casi les molesta tener tanta.

Guillermo Pérez Rossel

Yo se que no es para todos y que hay mucho para hacer en este pueblito, pero ¿no te da gana de arremangarte e ir? Tengo un amigo yorugua cerca, en Palencia, que seguro vendría a acompañarte con unos mates. Si querés, le aviso para que te ayude a buscar, juntos, ese tesoro de los Templarios que se supone nunca fue encontrado.

Podés ver más fotos en https://www.flickr.com/photos/pacohb/sets/72157622670330449/

Fuente: Elnortedecastilla.es

http://es.wikipedia.org/wiki/Iglesia_de_Santa_Mar%C3%ADa_del_Templo_(Villalba_de_los_Alcores)

http://es.wikipedia.org/wiki/Villalba_de_los_Alcores

hhttp://es.wikipedia.org/wiki/Castillo_de_Villalba_de_los_Alcores http://www.arteguias.com/noticias/octubre2014.htm