Sin antibióticos la peste diezmaba Europa. Había remedios estrambóticos, recomendados por tipos que se decían médicos. Pero también estaban los Santos Auxiliadores, que eran catorce y si no te curaban al menos te confortaban. 

Si empezás a leer creyendo que me voy a trenzar en una diatriba contra la iglesia, te equivocás de medio a medio. Estoy seguro que el atadito de ruda que me ponían unas tías bajo la almohada no me iba a salvar de contraer la tisis que se llevó a mi padre con apenas 33 años. Pero no soy quien para desconfiar del poder curador de los rezos de aquellas tías que realmente eran unas santas. Esas adorables mujeres velaron por mí mientras mi madre cuidaba a ese padre que me arrebató la ausencia de antibióticos cuando yo tenía nueve años.

Hicieron lo que mejor sabían hacer: me sobrealimentaron y no pararon de rezar. ¿Quién te asegura que no fueron esos rezos los que me curaron? ¿Debería pensar que me ayudaron más las ventosas que recomendaba el médico, o las dolorosas inyecciones de calcio y de hígado, una por día, malditas sean, tan dolorosas estas últimas que todavía recuerdo las punzadas? ¿O el asqueroso aceite de hígado de bacalao, o el huevo crudo dentro de un vaso de malta, todo recomendado por la medicina convencional? Dicho esto sin menospreciar a los académicos, que son así de terminantes y algunas veces equivocados porque la gente les exige certidumbres.

Tampoco puedo ignorar, con enfático agradecimiento y admiración, que en ese mismo año la medicina convencional me operó de una apendicitis que sin la ciencia me hubiera llevado a una horrible muerte por septicemia. Como ven esa edad no fue mi mejor momento… pero luego y muy lentamente, las cosas marcharon mejor. Digo, para que no crean que soy un llanto perenne.

En fin, antes de poner una sonrisita de mierda y agarrar para el lado de la superstición, deberías lavarte la cabeza y reconocer que es posible que no seamos solo soma, que no seamos únicamente un amontonamiento de moléculas y que puede haber algo mucho más grande y trascendente que nosotros, motas de polvo.

Te aclaro que no es lo que creo, soy escéptico radical más que agnóstico, pero por eso mismo soy inmensamente respetuoso de todas las creencias; estar tan convencido de que no existe nada fuera de este mundo, es una contra-religión que exige tanta fe como ese cristianismo que levantó admirables templos para poder invocar y agradecer a estos catorce Santos Auxiliadores. Y con esto, estamos en tema.

A algunos de nosotros nos parece algo novedoso porque es una tradición de origen germánico y porque acá se vieron poco a los catorce, pues los uruguayos somos tan asquerosamente racionales (creemos serlo) que en su tiempo nos burlamos de las estampitas usadas como cataplasmas, los sahumerios y los relicarios. Nos parecía más científica la ruda y el alcanfor; pero estábamos siempre listos a salir en estampida en busca del agua de Querétaro o cualquier otro elixir, con tal que no estuviera relacionado con la religión. Somos difíciles, no hay duda. En el norte de Europa en cambio o además, se invocaba a los Santos Auxiliadores de a uno o en patota, a los catorce juntos, como quien se toma un antibiótico de amplio espectro. Pero cada uno tenía su especialidad.

San Jorge

• San Acacio(8 de mayo), mártir, invocado contra los dolores de cabeza
• Santa Bárbara(4 de diciembre), virgen y mártir, invocada contra la fiebre y la muerte súbita. También es invocada con la frase «Santa Bárbara Doncella, líbrame de la centella» con el objetivo de obtener protección contra tormentas eléctricas
• San Blas(3 de febrero), obispo y mártir, invocado contra los dolores de garganta y los atoramientos del sistema respiratorio (tos).
• Santa Catalina de Alejandría(25 de noviembre), virgen y mártir, invocada contra la muerte súbita
• San Cristóbal(10 de julio), mártir, invocado contra la peste bubónica
• San Ciriaco(8 de agosto), diácono y mártir, invocado contra la tentación a la hora de la muerte
• San Dionisio(9 de octubre), obispo y mártir, invocado contra los dolores de cabeza
• San Erasmo(2 de junio), obispo y mártir, invocado contra las enfermedades intestinales
• San Eustaquio(20 de septiembre), mártir, invocado contra las disputas familiares
• San Jorge(23 de abril), soldado-mártir, invocado para conseguir la curación de los animales domésticos
• San Gil(Egidio en italiano) (1 de septiembre), ermitaño y abad, invocado contra la peste, y para hacer una buena confesión
• Santa Margarita(20 de julio), virgen y mártir, invocada durante el parto
• San Pantaleón(27 de julio), obispo y mártir, invocado por los médicos
• San Vito(15 de junio), mártir, invocado contra la epilepsia

La Virgen María estaba fuera del vademécum, se la invocaba como última chance cuando los catorce habían fallado. Y como curiosamente, aunque sea una misma ¿persona? a la virgen se la concibe como múltiple en sus diversas representaciones, con esta finalidad medicinal se la denomina María Auxiliadora o Nuestra Señora del Auxilio, razón por la cual no figura en esta lista.

San Blas, San Vito

A la propia lista hay que tomarla con pinzas, pues según las regiones –a veces a pocos kilómetros unas de otras— hay muy diferentes enumeraciones, tanto de santos como de sus propiedades. Acá te muestro otro “vademécum” que tiene la virtud de ser el oficial nada menos que en la Basílica de Vierzehnheiligen (se necesita otro Auxiliador para pronunciar esto), donde se asegura que nació esta tradición. Acá va.

• San Acacio(8 de mayo), mártir, invocado contra los dolores de cabeza
• Santa Bárbara(4 de diciembre), virgen y mártir, invocada contra la fiebre y la muerte súbita
• San Blas(3 de febrero), obispo y mártir, invocado contra los dolores de garganta
• Santa Catalina de Alejandría(25 de noviembre), virgen y mártir, invocada contra la muerte súbita
• San Cristóbal(25 de julio), mártir, invocado contra la peste bubónica
• San Ciriaco(8 de agosto), diácono y mártir, invocado contra la tentación a la hora de la muerte
• San Dionisno(9 de octubre), obispo y mártir, invocado contra los dolores de cabeza
• San Erasmo(2 de junio), obispo y mártir, invocado contra las enfermedades intestinales
• San Eustaquio(20 de septiembre), mártir, invocado contra las disputas familiares
• San Jorge(23 de abril), soldado-mártir, invocado para conseguir la curación de los animales domésticos
• San Egidioo (Gil) (1 de septiembre), ermitaño y abad, invocado contra la peste, y para hacer una buena confesión
• Santa Margarita de Antioquía(20 de julio), virgen y mártir, invocada durante el parto
• San Pantaleón(27 de julio), Obispo y mártir, invocado por los médicos
• San Guy(15 de junio), mártir, invocado contra la epilepsia

Muy bien, acá tenemos el vademécum y también una cura de amplio espectro para todo, hasta para la infidelidad y la duda ontológica. ¿Cómo se usa la influencia celestial de estos santos? Veamos cómo hacerlo para invocarlos en conjunto, según recomiendan en   http://caballerodelainmaculada.blogspot.com.uy/2015/08/los-catorce-santos-auxiliadores.html . Muy sencillo, se prescribe la siguiente oración, imagino que de rodillas y ante alguna imagen del equipo, comando o como se le quiera llamar:

“Bienaventurados Santos Auxiliadores, selectos amigos de Dios, yo os honro y venero como poderosos intercesores, y acudo con filial confianza a vosotros en mis necesidades, de las que para su remedio he resuelto hacer esta novena. Obtenedme por vuestra intercesión, aplacar la ira de Dios, la cual provoqué con mis pecados, y ayudadme a enmendar mi vida y hacer penitencia. Obtenedme la gracia de servir a Dios con todo el corazón, a resignarme a su Divina Voluntad, a ser paciente en las adversidades y a perseverar hasta el fin, de modo que, habiendo finalizado el curso de mi vida, pueda reunirme con vosotros en el Cielo, donde alabaremos por siempre a Dios Nuestro Señor, quien es admirable entre sus Santos. Amén”. 

¿No creés en nada de esto y ya te molestaste conmigo por andar divagando en estos temas? Bué, llegado el momento invocá a la Academia en busca de auxilio… pero pensá que todo esto nació en medio de la peste negra, durante el período de mayor desesperación colectiva. Pese a eso, no solo pudieron levantar esta iglesia sino también construir ciudades tan hermosas como esa idílica Bamberg que ves en la fotografía. Pues estamos en Baviera, un lugar muy especial con gente muy especial y arquitectura muy especial. Abrazate a la ciencia si querés… pero no dejes de visitar esta región.

Cuando emprendas el viaje a Munich te recomiendo llevar un libro sobre la vida de Anton van Leeuwenhoek (1632-1723), un tendero de Delft que entre tela y brocado, se entretenía fabricando microscopios y examinando muestras de todo tipo. Felizmente no era científico, porque si lo hubiera sido rechazaba la idea de la existencia de esos minúsculos animalitos que hoy conocemos como microbios. La Academia se burló, pero la evidencia la aplastó. Reíte de todo lo invisible, como los santos, pero ponete serio si te atropella un bacilo o si algún virus de la gripe aviar pone de nuevo en riesgo a toda la humanidad.

Para que tengas una idea, a la Basílica de Vierzehnheiligen la visitan más de un millón de personas cada año… y se ven saludables. Fue construida por Johann Balthasar Neumann y dedicada a los 14 santos intercesores o auxiliadores. Dice la Wikipedia que el 24 de septiembre de 1445 un joven pastor del monasterio franciscano, Hermann Leicht, vio a un niño que estaba llorando en un prado cercano al monasterio cisterciense de Bad Staffelstein, cerca deBamberg. Mientras pensaba en si se aproximaba o no a él, el niño, sorprendentemente, desapareció. Un poco más tarde, el niño volvió a aparecer en el mismo lugar con una vela a cada lado de su cuerpo. En junio de 1446, el niño se le apareció al pastor por tercera vez; en esta ocasión se veía una cruz roja sobre su pecho e iba acompañado por otros trece niños. El niño se dirigió al pastor diciéndole: «Nosotros somos los catorce intercesores y queremos que se construya aquí una iglesia en nuestro nombre.¡Si tú nos ayudas, nosotros te ayudaremos!». Poco después, el pastor vio cómo dos velas encendidas descendían del cielo y se posaban en ese lugar. Milagrosamente, también fue curado de unas heridas gracias a la intercesión de los catorce santos. Los monjes franciscanos instalaron una capilla en el lugar de la aparición, comenzaron los milagros y  de inmediato atrajo a los peregrinos. No te voy a hacer una lista de los reyes que peregrinaron hasta allí… pero te mencionaré a Alberto Durero como uno de los fieles más entusiastas. Está en una de las vía del Camino de Santiago.

La iglesia se comenzó a construir recién en 1743 y se terminó en 1772, pero en ese entonces hacía 300 años que los feligreses hacían peregrinaciones hasta el viejo altar entre los meses de mayo y octubre. La historia de los 14 auxiliadores casi termina en 1803, cuando durante la secularización los monjes franciscanos debieron abandonar el monasterio y las peregrinaciones fueron prohibidas. Tal era el desorden que robaron los órganos y la carpintería de las dos torres. Pero en 1839 el rey Luis I de Baviera reconstruyó la iglesia y restableció las peregrinaciones. En 1897 el Papa León XIII elevó la iglesia a la categoría de basílica menor y en el siglo XX se le hizo un mantenimiento constante y prolijo.

Es una gran iglesia… pero no tiene ni comparación a la que se levantó en la ciudad de Praga, en la República Checa, en honor a San Vito, uno de los más consecuentes integrantes de la lista de Santos Auxiliadores. Forma parte del Castillo de Praga y es una de las más extraordinarias catedrales góticas, aparte de que Praga es un monumento a la mejor arquitectura mundial. Prudentemente, los checos de 1989 resolvieron que San Vito compartiera los honores con San Wenceslao y San Adalberto. Siempre es bueno reforzar la protección celestial cuando a uno le toca sobrellevar dos guerras mundiales, al nazismo, al comunismo y a todas esas cosas que les ocurren a los países, pero que a ellos les tocó vivirlas por duplicado, quizás como compensación por vivir en una ciudad tan hermosa.

Para terminar; la devoción a los catorce auxiliadores no se agota en Alemania y República Checa, hay iglesias que los veneran en Italia, Austria, Hungría, EEUU y otros países. No es que te quiera convertir al catolicismo ni al ateísmo, pero tengo una cruzadita personal a favor de la tolerancia y de la duda cartesiana. No es solidario estar en contra de nada. Para finalizar y dando por sentado que a la religión no se llega por el razonamiento y que las verdades científicas –como cualquier «verdad»– tienen un componente de esa fe sin la cual no hay certidumbre; y en homenaje a la inteligencia, ¿sabías que Einstein a su manera creía en Dios? También a su manera creía Voltaire, tan crítico con los sacerdotes.

Guillermo Pérez Rossel

https://es.wikipedia.org/wiki/Bas%C3%ADlica_de_Vierzehnheiligen

https://www.behance.net/gallery/17641061/Analisis-del-Santuario-de-Vierzehnheiligen-2011-2