De Berlín al Polonio y otros once lugares que me falta conocer
Así lo expresa nuestro amigo Damián Argul para a continuación reconocer que cuanto más mundo uno conoce, más descubre lugares que querría conocer. En la foto, la nueva cúpula del Reischtag, en Berlín.
Lo cual no es otra cosa que el principio socrático sobre la sabiduría, en su vertiente turística. De hecho la sabiduría consiste en eso, en una insatisfacción progresiva y en la comprobación de que quien se vanagloria de saberlo y conocerlo todo, no es más que un necio. Damián debe ser uno de los uruguayos más y mejor “viajados”, pero no alcanza una vida para conocer ni siquiera lo más relevante y hasta por el camino le quedan lugares impensables por lo trillados. Eso es lo que explica que nunca se haya podido tomar tiempo para ir al Cabo Polonio. En mi caso y como él, tampoco conocí la India… pero curiosamente no lo lamento. El no tuvo tiempo u oportunidad; yo quedé tan impactado por alguna pobreza y miseria que vi por el mundo, que a esta altura de sensibilidad provecta, no podría resistir esa prueba ni con los contrastes que ese apasionante país ofrece.
Por Damián Argul
Esta es mi lista – por orden alfabético- de los 11 lugares que tengo más pendientes. Cuanto uno más viaja más se da cuenta de todo lo que le falta por conocer. Cuando pienso que tras incontables viajes a EEUU solo conozco la mitad de sus cincuenta estados me doy cuenta de esto.
Claro está que viajar por obligación no es lo mismo que por placer, donde uno es dueño de su tiempo. Entonces, como dice el doctor da Silveira , el querido Toto, “uno debe aprender a robar tiempo al sueño y al descanso”, y por eso, una madrugada en Londres, recorriendo la Abadía de Westminster – cuando el Mundial de 1966 en la víspera del partido Inglaterra- Uruguay, un “Bobby” nos encandiló pidiéndonos documentos. Se los dimos y nos los devolvió diciendo: “Soy Irlandés, ojalá ganen mañana”. Recién ahí aprendí, porque viajando se aprende, que aunque rubios y hablando inglés ni ellos, ni los galeses, ni los escoceses, eran ingleses.
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Y si gracias a mi trabajo recorrí mucho mundo, por esa causa me quedé muy cerca de visitar varios de estos destinos que todavía tengo pendientes: Ouro Preto, Berlín, Marrakech, Meteora, Nantucket, para empezar. Hoy algunos de esos lugares ya parecen demasiado lejanos, pero no pierdo la esperanza y por eso mantengo vivo el deseo.
Acá van esos destinos que quiero visitar, el porqué de ello junto con algunos datos que he ido recopilando después de tantos años en esto de los viajes,
1-BERLÍN.Alemania.
Es la única gran capital europea que me falta pese a que conozco bastante bien Alemania, destino imperdible. Desde la caída del muro Berlín, no ha cesado de crecer y modernizarse, siendo hoy una de las capitales más movidas de Europa.
Lo que me gustarpia hacer: Visitar primero el Altes Museum para ver la cabeza de Nefertiti – de mis libros de Liceo- y en el museo de Pérgamo la Puerta de Ishtar ( 575 A.C.) esa maravilla del mundo antiguo, el Monumento a los Judíos Asesinados de Europa, que al parecer no deja a nadie indiferente, y el Reichstag con la espectacular cúpula de Norman Foster, sentarme en Kaeferm, el restaurant de la azotea, con la mejor vista de la ciudad . Pero dicen que a Berlín, sobre todo, hay que caminarla, vivirla tanto de día como noche ya que tiene una de las vidas nocturnas más agitadas de Europa. El periódico “exBerliner” sirve de guía para saber todo lo que pasa.
2.- CARTAGENA DE INDIAS. Colombia
La lectura juvenil de Biografía del Caribe de Germán Arciniegas despertó mi interés por este puerto colombiano centro de apasionantes historias de piratas cuando pertenecía a la Corona Española.
Lo que más se recomienda: Cartagena hoy es un destino turístico de primer nivel que ha sabido conservar el encanto de su Casco Antiguo amurallado en el que otras cosas hay que conocer el Castillo San Felipe de Barajas y el Museo Naval del Caribe .Al recorrer su bien conservada ciudad vieja la gente se encuentra con muchos escenarios de los libros de García Márquez y de su propia vida. Dice de ella em” Vivir para Contarla” : «Me bastó con dar un paseo dentro de la muralla para verla en toda su grandeza a la luz malva de las seis de la tarde, y no pude reprimir el sentimiento de haber vuelto a nacer».
Las oportunidades para disfrutar de las aguas del Caribe no faltan, las mejores playas se encuentran en la Península de Barú a pocos kilómetros o en cercanas islas (en la foto) donde se puede pasar un magnífico día de playa. Al igual que en el resto de Colombia la gastronomía, local e internacional y la música (cumbia, salsa, vallenato, merengue) le ponen ritmo y sabor para disfrute de los viajeros.
2.- CABO POLONIO .Uruguay.
El púnico lugar de Rocha que me falta. Mi interés ha crecido en los últimos años ya que lo veo como un lugar único y diferente, que espero pueda mantenerse así y a ningún “”burócrata iluminado” e se le ocurra “pasteurizarlo”.
Entre dunas y rocas el Polonio congrega pescadores, visitantes y lobos mrainos, que disfrutan las playas de blanca arena y aguas transparentes. Hay que dejarse atrapar por el ambiente de este pueblo sin autos, luz agua ni corriente eléctrica, con animadas noches iluminadas en forma intermitente por un solitario faro. Hay variadas opciones de deportes náuticos y la vida social es intensa
Mini Data. Se llega por la ruta 10 en el kilómetro 264,5 donde están los estacionamientos y la terminal de buses en la Puerta del Polonio a 7 kms del pueblo. El viaje hay que continuarlo a pie, caballo o en pintorescos camiones gigantescos tipo “bañadera”.
Para alojarse hay posadas, ranchos y casas, algunas de las cuales se pueden alquilar por la infaltable Airbnb.
3.- CORK. Irlanda.
La más irlandesa ciudad de la isla Esmeralda con su población de fuerte personalidad, orgullosa de sus raíces celtas, sus tradiciones, alegres pubs y su hermosos paisajes rurales, De ese país siempre Cork me pareció la ciudad más atractiva, ahora mucho más atractiva que nunca ya que en ella viven mi hijo Federico y su mujer Mariana.
Ver y hacer. Una ciudad sin desperdicio donde hay que conocer el Bolsa de la Manteca, el Univesity College establecido en 1845 como Queen’s College,que ofrece un tour por su canpus y la Glusckman Art Gallery, un moderno edifico integrado a la universidad, el English Market (1788), la Catedral, el Castillo Blarney, Cork City Gaol- antigua prisión y las famosas campanas de la iglesia Santa Ana.
Un placer particular es caminar por sus animadas calles comerciales donde tiendas alternan con bares, música, restaurantes y unas muy pintorescas tiendas de regalos y souvenirs. Todo el Condado de Cork tiene un inmenso atractivo: el cercano puerto de Cobh de rica historia marítima , cerca de su costa fue hundido por los alemanes en la ¨Primera Guerra Mundial el RMS Lusitania un lujoso transatlántico. Cobh fue también la última escala del Titanic lo que se recuerda en la Titanic Experience.
Recoriendo su hermosa campiña encontramos castillos, palacios y pintorescos pueblos con tradicionales pubs entre los que se destaca The Old Thatch en Killeagh a 30 kilómetros de Cork City aunque conviene reservarse para la noche en la ciudad y recorrer la calle Oliver Plunket llena de pubs y bares con música donde se puede brindar con sidra, cerveza o whisky irlandeses todos.
4.- DUBROVNIK. Croacia
El pintor José Cúneo, amigo de mi familia, hablaba maravillas de esta joya del Adriático. En aquel tiempo no era un lugar fácil de visitar ya que pertenecía a la antigua Yugoslavia donde su hijo Rolando era cónsul uruguayo. Después de ver fotos y descripciones de esta ciudad parecería que el haber sido declarada Patrimonio de la Humanidad le agrega poco valor a esta maravilla medieval resurgida esplendorosamente después de la Guerra de los Balcanes.
Para no perderme: Recorrer las murallas que rodean la ciudad y se sumergen en la costa Dálmata parecen ser lo actividad principal que ya de por si justificaría un viaje. En el recorrido hay varios fuertes y fortalezas dignos de visitar especialmente la de San Juan enorme fortaleza que data del siglo XVI.Sin embargo al recorrer las murallas lo que deslumbra al viajero son las vistas del Adriático y de la ciudad medieval con sus calles de mármol blanco.
La ciudad medieval cuya calle principal Stradun (Placa) ofrece un comercio tan variado como atractivo. Por supuesto ue los amantes del arte y de la historia tienen museos, iglesias y edificios para visitar pero hay dos que llaman la atención:
El “Love Story Museum” dedicado al amor y al romance contando historias locales e internacionales y y lo opuesto al amor War Photo Limited que registra historias mediante el fotoperiodismo escenas de la guerra de los Balcanes de finales del pasado siglo XX.
Las opciones de playa son muchas y también islas cercanas entre las que resulta imperdible Lckrum a solo 10 minutos del puerto antiguo con muchos testimonios históricos incluyendo los restos de un monasterio benedictino del siglo XIII y el palacio que fue residencia de Maximiliano de Hasburgo.
Un capítulo aparte la gastronomía que según dijera ese gran viajero que es Julio Alonso, de buen diente es la “más sabrosa del mundo” y se disfruta tanto en las pizzerías como en los más sofisticados restaurantes.
5.- MARRAKECH. Marruecos
Escapadas a Tánger avivaron mis deseos de conocer esta maravilla, muy vinculada también al orientalismo, la atracción europea por las culturas exóticas. Los cuadros de Ingres, Jerome, Delacroix, Fortuny y Matisse la hicieron muy atractiva y digna de conocer. Marrakech hace gala de una cultura árabe/bereber auténtica y a la vez que combinan con las tradiciones coloniales francesas deleitando todos los sentidos.
Ver y hacer. Recorrer la Medina y perderme en los laberínticos sokos – con GPS, si se puede- la plaza Jemaa el Fna y su intensa vida, maravillarme con sus admirados jardines y palacios, visitar Dar Si Said palacio convertido en museo dedicado a las artes aplicadas incluyendo puertas y jot y el de Ivves Sanit Laurent moderno edificio interesante aún para quien no le interese la moda.Muy cerca y para no perderse el cercano Jarín de Majorell donde residiera el famoso diseñador.
De noche incluiría un espectáculo de la danza del vientre, em el cásico Comptoir Darnatomar, sentarme en el Café de France contemplando el desfile de pintorescos personajes demostrando insólitas habilidades y tomar algo en el Bar Churchill de La Mamounia, hotel palacio o palacio hotel, para muchos el mejor del mundo.
Algunos datos. Se llega en avión desde varias ciudades de Europa incluso con vuelos “los cost”. Cruzando el estrecho de Gibraltar se va en auto o en excusiones desde España, aprovechando para recorrer el país e incluso pernoctar en el desierto si no es exageradamente comercial.
6.-METEORA. Grecia.
Fue amor a primera vista, cautivado por la foto de un montacargas a tracción humana, subiendo alimentos a los monjes de un Monasterio suspendido en el aire (meteos) . Otras fotos de otros monasterios recuerdan algunas pinturas pre renacentistas de las épocas en que los artistas todavía no firmaban sus cuadros.
Para ver y hacer. Quedan hoy solo siete monasterios en la cima de otras tantas enormes rocas que sirvieron en el siglo XIV de refugio a monjes ortodoxos de los otomanos y para estar en el aire (meteos). De esos templos varios son visitables y de relativamente fácil acceso. Se pueden admirar maravillosos murales pero lo que predomina es el ambiente místico, espiritual e incluso religioso que seguramente debe conmover al más incrédulo y un ascetismo difícil de comprender en esta época. El tiempo que uno le dedica a la contemplación o la meditación lo decide cada uno.
Informacipon. Ubicada a 375 km de Atenas se puede acceder en auto por buenas carreteras, tren o excursiones que salen desde Atenas visitando otras maravillas.
Los pueblos vecinos de Kastraki y Kalambaka ofrecen alojamientos tan adecuados en precio como en comodidades: El primero tiene mejores vistas y un ambiente más adecuado a la ocasión. Kalambaka es el más turístico y cómodo en muchos aspectos.
En cuanto a los comidas – alimentos para el cuerpo – hay distintas opciones donde no faltan los platos típicos griegos: souvlaki, moussaca y ensalada mediterránea. Algunos monasterios venden productos propios que pueden servir para engañar al cuerpo que nos acompaña.
7.- NANTUCKET. EEUU.
Un viaje postergado. De hecho una vez llegué hasta Htannys Port – la playa de los Kennedy –en Cape Cod, Massachusetts y justo al embarcar en el ferry cancelé el viaje por indisposición de uno de mis compañeros de viaje
Melville puso esta isla en el mapa con su novela Moby Dick.Como otros puertos balleneros con sus solitarios faros a rayas blancas y rojas y las casas que recuerdan los silenciosos cuadros pintados por Edwad Hopper… La isla tiene un ambiente “bohemio elegante” similar al de algunas playas de por acá, que la hace muy atractiva.
Como centro de vacaciones de verano, hay mucho más para hacer que para ver. Magníficas playas, tiendas atractivas ideales para eqquiparse para el verano austral, paseos que recorren las casas de los ricos y famosos y otras que se icen ocupadas por fantasmas, actividades deportivas , buena vida nocturna y una gastronomía que incluye la infaltable italiana, para comer al uso nostro, asados y sobre todo frutos de mar: gigantescos camarones, la tradicional sopa de almejas de Nueva Inglaterra ( clam chowdeer)y un orgullo local: el sándwich de langosta o lobster roll. Quedan dos recomendaciones: el museo de los balleneros- Whaling Museun – y las puestas de sol que se pueden disfrutar en algunos paradores con servicio acorde al momento.
Mini Data: A Nantucket se llega por ferry desde el puerto de Hyannis o por avión desde Boston y Nueva York. La hotelería es buena y para todos los gustos incluyendo posodas y hoteles bputique muy acogedores.
8.-OURO PRETO. Brasil.
Como ciudad clave e imperdible siempre estuvo en mis planes por el Barroco Colonial y sobre todo por la descomunal obra del Alejaidnho, un escultor que me atrevo a llamarlo “el Miguel Angel de América”, De las veces que pasé por Belo Horizonte la capital del estado, solo una vez en la tardecita pude escaparme a Sábará – a 20 kilómetros- para conocer la Iglesia Nossa Semhora do Carmo, donde el Alejaidinho dejó su marca en algunas ornamentaciones.
Pero Ouro Preto siempre me sigue quedando pendeinte así como las cercanas ciudades del Oro: Tiradentes,Mariana, São João del Rei y especialmente Congonhas do Campo donde el escultor luce en todo su esplendor en el Santuário de Bom Jesus de Matosinhos con sus Doce Profetas tallados em piedra-jabón.
Ouro Preto que es un viaje al Siglo XVIII, ya que , magníficamente preservada, se conserva como en aquella época donde gracias al hallazgo de oro alcanzó su máximo esplendor. Hay que vistar Teatro Municipal , el Museo de la Inconfidência o a la Casa dos Contos.En Ouro Preto hay ocho capillas y trece iglesias en las que se aprecia la obra escultórica y un gran despliegue de oro, ambas deslumbrantes.
Con todo eso merced la presencia de dos universidades Ouro Preto no es una poco animada Ciudad Museo sino que bulle con la presencia de una abundante población estudiantil.
9.-RAPA NUI. Chile
La Isla de Pascua, un triangulito en el medio del océano Pacífico con sus 900 imponentes mohaais es un paraíso lleno de misterios. Ver y hacer. Lo primero que se recomienda en la Isla de Pascua es tomarse todo con calma ya que allí la prisa no existe.
Lo principal para ver son esas impresionantes figuras antropomórficas de cabeza desproporcionadamente grande sin otro expresión que la de mirar un punto fijo. Son figuras talladas en piedra, de seis metros de altura y 30 toneladas de peso. Todo lo demás es misterio y durante la estadía en la isla experimentados guías , estudiosos o cualquier poblador local nos dirán distintas sobre su origen, como se se hicieron, transportaron, que significan y mil historias más. Ahonda el misterio la cantera de Rano Raraku, donde hay varios mohais inacabados, incluyendo uno de 23 metros largo.
Hay hermosas playas de arena blanca y aguas transparentes que permiten disfrutar de grandiosos baños en el Pacífico. Anakena la playa más recomendada está flanqueada por un conjunto d mohais de particular nterés para los investigadores. Como no podía ser de otra manera la gastronomía se basa en los frutos de mar que bien se puede acompañar de pisco y vinos chilenos.
MinidAta. A Isla de Pascua se vuela con Latam entre Santiago de Chile y Papete( Tahiti)Para alojarse hay hoteles,posadas y cabañas, siendo muy recomendable el Explora Rapa Nui una cadena que se adapta a su entorno ofreciendo además excelente servicio. Para moverse hay bicicletas, caballos, autos, siendo el senderismo muy practicado y recomendado.
10.- VILNA.Lituania.
Durante uno de aquellos grandes congresos que llegaron a Punta del Este al retorno de la Democracia, conocí un joven Vice Presidente de Lituania bastante desorientado. Recién independizados del bloque soviético estaban saliendo a hacerse conocer y conocer el mundo . Hasta ese momento solo sabía de la presencia de una comunidad lituana asentada el Cerro entre de la que se stacaban algunos deportistas y pintores.(Baitler,Gurvich). A partir de esa época y con esa política de “abrir mentes” Lituania se ha transformado en país de avanzada y mientras Vilna,su capital es un reservorio cultural que gurda testimonios del siglo XIV, un antiguo barrio judío diezmado por el holocausto y testimonios de la época soviética.
La Ciudad Antigua de es una joya del barroco con intricadas calles adoquinadas ,Palacio de los Grandes Duques de Lituania, meticulosamente restaurado), su planta medieval alberga una variedad de estilos, apiñados, desde la gótica iglesia de Santa Ana hasta la clásica fachada de la colosal Catedral de Vilna.
Curioso y atractivo Uzuois es un barrio autoproclamado “república independiente” que empezó como la broma o un hppening de un grupo de artistas y hoy tiene bandera y una constitución desopilante que parece escrita por Groucho Marx. Es un barrio donde se respira arte y libertad. . No pude todavía averiguar si sus cudadanos pagan impuestos a la ciudad y el país. Es imperdible la visita a Trikal una isla castillo que ya ha sido descripta en esta sección.
Y por último, el undécimo, un tremendo país: La India
Los dulces cuentos de Rabrindanath Tagore, que leí de muy joven en casa de mi abuela Clara me hicieron amar este país del que seguí prendado pese a las críticas de Borges al referido autor. En esa época me habían interesado mucho las enseñanzas de Siddharta Gautama (Buda).
Tuve a lo largo de mi vida diversos encuentros con la gente y la cultura de la India y su gente: en Sud África y especialmente en Durban donde Mathama Gandhi forjó su lideazgo, en el Londres de los ‘60 en restaurantes donde se podía comer barato y con gusto a algo, en los taxis de Nueva York conducidos hindúes, con o sin turbante, y en los pintorescos restaurantes de la calle 4. Finalmente es un placer admirar sus artes aplicadas en algunos comercios de Uruguay.
Mimuchas grandes películas y hasta la comedia Comer, Rezar, Amar donde Julia Roberts me hizo ver la mejor manera de sumergirse en la cultura de este país.
Esperando tener tiempo para quedarme ahí y prepararme para ese viaje no tengo claro que quiero conocer. Descartaría Mumbai, Calcuta y Dehli aún corriendo el riesgo de no encontrarme con Julia Roberts y ni visitar el Taj Majal.
Las opciones parecen infinitas:
Benarés, ciudad sagrada ,Rajastán, Tierra de Reyes, Khajuraho, y la sensualidad,
Amristar y su templo dorado,ellos. Ajanta con sus grutas talladas por monjes en el siglo II A.C..Hampi, antigua capital del reino vijayanagara y Kushinagar, lugar en el que falleció y en el que alcanzó el nirvana.
Por cierto que me gustaría conocer muchos otros lugares, entre otros San Petersburgo, Jujuy, Oviedo, San Marino y sobre todo , el pueblito del País Vasco francés de donde vino mi abuela Graciana. Dicen que visitar estos pueblos, de donde vinieron nuestros antepasados pese a no tener un gran atractivo turístico, constituye una experiencia inolvidable. De eso se trata el viajar.