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Nada tan creativo y destructivo como las verdades

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Por creer en una de ellas, construyeron esta maravillosa joya y por no creer en lo mismo, destruyeron casi todas las demás. El hombre es un bicho muy loco.

Lo que estás viendo es la Iglesia de San Vital, en Rávena, al norte de Italia, sorprendentemente a dos horas y media (o menos)  manejando desde Venecia. Está en el meollo turístico de Italia. ¿Por qué no es más popular? ¿Cuál es su pecado a menos que todavía esté vivo el enfrentamiento entre Bizancio y Roma? La construcción tiene rango de basílica menor desde 1960 y desde 1996 forma parte del Patrimonio de la Humanidad en la clasificación de la Unesco… pero pudo haber sido destruida como muchas otras obras bizantinas cuando el cristianismo estuvo dividido y sangrientamente enfrentado debido a dos verdades contradictorias: ¿las imágenes eran lo santo o lo santo era lo que representaban?

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Estas cosas así dichas parecen entrañar una crítica a la religiosidad, que no tiene nada que ver… pues el problema radica en la falibilidad de los hombres y en la peligrosidad de las verdades: sin convencimientos no hay guerras, nadie sale a matar o morir si falta la convicción. Pero sin Fe tampoco hay obras de arte con esta magnitud. Además, nunca hay una verdad única a menos que la libertad de conciencia haya sido aplastada.

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Ese enfrentamiento terminó con la destrucción de todo lo que tuviera un aire bizantino en la península y si esta iglesia se salvó fue por la coincidencia de al menos dos factores determinantes. El arte bizantino fue diezmado durante la Querella Iconoclasta de los siglos VII y VIII y la destrucción se completó al caer Bizancio en manos de los turcos. Rávena se salvó porque la ciudad se posicionó contra los iconoclastas y porque durante toda su historia procuró equidistancia con las fuerzas que a lo largo de la historia se empeñaron en matarse y destruirse en Italia y el continente europeo. Da angustia pensar en todo el arte que se debe haber perdido por convicciones que el tiempo terminó moderando. Y maravilla ver cómo la tolerancia salva tesoros culturales como éste.

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Curiosamente, es un edificio casi privado, porque si bien se construyó siguiendo el expreso deseo del emperador Justiniano, para afirmar los territorios conquistados por su Imperio Bizantino, los fondos los puso el banquero Juliano Argentario, concretamente fueron  26.000 bezantes de oro. Y te aclaro que así se llamaban las monedas acuñadas por los cruzados que gobernaban el Reino de Jerusalen. Tan extraña emisión tenía la particularidad de que inicialmente tenían leyendas en escritura cúfica (caligrafía árabe) y naturalmente, el oro procedía de los saqueos. Luego incorporaron símbolos cristianos.

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La construcción de la iglesia de  San Vitale di Ravenna fue supervisada por el arzobispo de la ciudad, Maximiano, quien la consagró en el año 547. Todos estos personajes aparecen en la decoración  que se realizó entre los años 546 y 548, año de la muerte de la emperatriz Teodora, explican en la Wikipedia. Los mosaicos son impresionantes y dan una idea de la terrible pérdida que la humanidad tuvo cuando destruyeron todo lo que tuviera apariencia bizantina, durante durante la Querella Iconoclasta de los siglos VII y VIII, y con la caída de Bizancio a manos de los turcos. En San Vital se han preservado (aclaran en la misma fuente) porque Rávena se posicionó en contra de los iconoclastas.  “La iglesia tiene la consideración de basílica menor desde el 7 de octubre de 1960. En 1996 la iglesia, con otros edificios paleocristianos, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, con el nombre de «Monumentos paleocristianos de Rávena».

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No es justo ser demasiado severo ni con Justiniano ni con las jerarquías romanas que ordenaron la destrucción. En el siglo XXI no estamos calificados para evaluar el pensamiento de aquellas gentes capaces de crear belleza hoy irrepetible, al tiempo que dar muestras de una crueldad asombrosa. Justiniano intentó recuperar al viejo imperio romano, aunque gobernando desde Bizancio y de hecho lo logró, hasta que la peor epidemia de peste en la historia de la humanidad se desató sobre todo ese territorio. La “Plaga de Justiniano” cambió el eje de la civilización occidental. Si no hubiera sido por eso, Rávena se habría consagrado como capital de la región occidental del imperio, lo que se llamó el Exarcado de Rávena.

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La epidemia devastadora conocida como la Plaga de Justiniano a comienzos de la década de los años 540 marcó el final de una época de esplendor. Se cree que fue un brote de peste negra, aunque no se sabe a ciencia cierta. El imperio entraría en un periodo de pérdida de territorio que no sería revertido hasta el siglo IX.

Desconocemos el nombre del arquitecto, pero el diseño es similar al de la iglesia de los Santos Sergio y Baco, en Bizancio. San Vital está más alejado aún de la tradición paleocristiana, aclaran las fuentes. Se accede al templo por un nártex (atrio)  descentrado que da paso a una sala de oración con un doble anillo octogonal formado por el deambulatorio. “Todo el edificio ha sido diseñado respetando muchos de los elementos de la tradición eclesiástica antigua, en la que se exigía la separación de sexos durante los actos de culto, así como la posibilidad de que asistiesen altas jerarquías, siguiendo un protocolo estricto reflejado simbólicamente en los mosaicos. Así, el nártex tiene dos puertas: una para los hombres y otra para las mujeres”.

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Hay hermosos revestimientos de un mármol veteado especial, que solo se encuentra en una isla del mar de Mármara, cercana a Bizancio. Pero lo que más resalta son los mosaicos, considerados una cumbre en este arte bizantino. Todo luce gracias a las grandes ventanas superiores intercaladas al solo efecto de iluminar el conjunto.

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Lo que atrae especialmente a los expertos de todo el mundo, son los famosos mosaicos de Justiniano y el dedicado a su esposa Teodora. Ni el emperador ni su esposa estuvieron nunca en la ciudad de Ravenna, pero el obispo Maximiano que era la mayor jerarquía bizantina en occidente, quería remarcar su pertenencia, su fidelidad y su proximidad con  Justiniano y con la divinidad. Dejo que las fuentes hagan la descripción: “El emperador está acompañado por su corte y por el obispo Maximiano, cargando los elementos litúrgicos para la misa; y a su derecha, la guardia real. Todos están de pie ante un fondo verde y dirigen su mirada hacia el espectador. Frente a este panel está el de la emperatriz Teodora, sosteniendo un cáliz de oro y también junto a su séquito y a una fuentecilla de agua”. En otro orden, los mosaicos pretenden afirmar el reconocimiento de la divinidad de Cristo como hijo de Dios y la relación entre Dios y el emperador.

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Te podrás imaginar que el patrocinador de todo esto, el banquero Juliano no podía faltar en este hipotético cortejo. Ahí lo tenés, asomando tras el hombro derecho de la figura central de Justiniano… pero prudentemente en un respetuoso segundo plano. Enfrente está el mosaico de la emperatriz Teodora, portadora de un cáliz de oro. A su derecha, se ven dos dignatarios no identificados y a su izquierda lucen Antonia y su hija Juana, esposa e hija del general Belisario, el conquistador de Ravenna.

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También destaca (dicen las fuentes) la profusa decoración vegetal en “la que se enmarañan numerosas flores, pájaros, y cuernos de la abundancia, todo rodeando a un Cristo de aspecto helenístico (joven, imberbe, rubio…), sentado sobre el globo terráqueo, con la mano derecha ofrece la corona del martirio a San Vital, y, con la izquierda recibe la maqueta del templo del arzobispo Ecclesio”.

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El período de Justiniano marca el máximo esplendor del Imperio Bizantino. En anaranjado se aprecia el imperio tal como era cuando él asumió y en verde sus conquistas de uno y otro lado del Mediterráneo, incluyendo el sur de lo que hoy es España. En esa Segunda Edad de Oro cuya cúspide fue el año 550, Rávena se convirtió en la más importante ciudad de occidente, se la consideró la segunda capital del imperio, gobernada por un exarca que en los hechos era un virrey con sumo poder.

 

Guillermo Pérez Rossel

https://es.wikipedia.org/wiki/Iglesia_de_San_Vital_de_R%C3%A1vena

https://arte.laguia2000.com/arquitectura/san-vital-de-ravena-538-547

https://sobreitalia.com/2009/08/30/basilica-de-san-vital-de-ravenna/1024px-Meister_von_San_Vitale_in_Ravenna_009