El tesoro perdido del galeón San Jose
Disfrazar de misión evangélica una operación de pillaje contra indígenas americanos ya era una cochinada… pero tratar de escapar a la piratería inglesa era confiar demasiado en la protección de una religión que ya estaría bastante avergonzada por todo eso. Y eso demuestra que anglicanos y católicos creían en lo mismo, cuando se trataba de un tesoro de 5.000 millones de dólares de los actuales. Falta saber de quién sería todo eso… en el caso de que el hallazgo no sea otra escenografía capaz de convencer a medias al presidente de Colombia.
Por Alberto Moroy
En la portada el galeón San Jose prendido fuego después de una tremenda explosión (de época. Royal Museum, Greenwich). Hacia la derecha la popa del navío ingles Expedition (70 cañones). La batalla de Barú fue un combate naval en la península de Barú que ocurrió el 8 de junio de 1708. Se desarrolló frente a las costas del actual Caribe colombiano, cerca a Cartagena de Indias, entre una flota del Imperio español y una escuadra pirata británica, con el solo objeto de quedarse con el tesoro trasportado. Trescientos años después después, la armada colombiana ha descubierto donde se encuentra el galeón San José, uno de los restos más importantes de la historia de la arqueología, con un tesoro valorado en varios miles de millones de euros. Sin embargo, más allá de la emoción de su descubrimiento, la polémica está centrada sobre la propiedad del pecio.
Así dibujaron el galeón San José
La vida en el navío San Jose
En su diseño original, el barco estaba armado con 44 cañones de hierro. Era un galeón de dos cubiertas y su medición realizada el 18 de mayo de 1698 confirmó que tenía, 1.066 y 6 octavos de una tonelada de capacidad. Sus principales medidas fueron: 41.40m de eslora; 34.58 m de quilla; 12.55 m de manga y un puntal de 5.75 m La vida en el galeón San José era un incierto y hediondo infierno: mucho calor de día, mucho frío de noche, gente hacinada y sin higiene, animales, alimentos podridos, agua corrompida, vómitos y demás “menudencias”… Grande para la época, pero con solo 400 metros cuadrados habitables, el galeón San José navegaba con un promedio de 600 personas a bordo, de los cuales 168 eran gente de mar, 133 eran gente de guerra y el resto, pasajeros: burócratas, comerciantes, aventureros y familias, que se convertían en un tremendo estorbo para las operaciones navales.
El resto de los navios
http://www.melillamedioambiente.com/wp/blog/2018/03/18/1-708-combate-de-baru/
10 de marzo de 1706
Tras varios retrasos, las flotas de Tierra Firme y de Nueva España, en total veintiséis barcos partieron de Cádiz el 10 de marzo de 1706 rumbo a las Indias. Por encima de todos destacaban el «San José» y el «San Joaquín», ambos a la vanguardia de la marina española, capaces de transportar enormes cantidades de carga y pasajeros. El galeón «San José» con sesenta y cuatro cañones era la nave capitana o buque insignia, mientras que como almiranta lo hacía un barco gemelo, el «San Joaquín».
Rojo ruta de ida, punteado el regreso que no fue
La feria de Portobello
La Feria de Portobelo era el escenario donde tenía lugar el grueso de los intercambios comerciales anuales entre España y sus territorios del Virreinato del Perú durante más de siglo y medio entre 1606 y 1739 Celebrada en la ciudad de Portobelo, ubicada en las costas caribeñas de la actual Panamá. Por allí pasó la plata extraída de las minas del Virreinato del Perú, así como esclavos y otras riquezas en viaje hacia las colonias americanas durante el período de máximo esplendor del Imperio español. En todas las calles, plazas y a orillas del mar, se levantaban tiendas de campañas para el almacenaje provisional de la mercadería. .
Durante todo el año, pasaban las riquezas que provenían del Perú y Ecuador y Bolivia a fin de ser embarcadas con destino a España. Estas riquezas llegaban a la Ciudad de Panamá, luego cruzaban el istmo mediante recuas de mulas hacia Portobelo, pasando por el Camino Real o por el de Cruces, este último, recorría parte por tierra hasta la población de este nombre y luego seguía por un tramo del río Chagres. (130 km) El 60% de de todo el oro que llegó a España entre 1531 y 1660, pasó por Panamá (En 1737 se realizó la última feria en Portobelo)
La feria / La aduana
Fuerte Portobelo
Portobelo, Colón. Panamá
La organización de la feria fue caótica, entre otras cosas porque el virrey Castelldosríus tenía sus propios “curros” con los comerciantes locales, con los que compartía los beneficios del contrabando. A pesar de todo la flota logró partir de vuelta a Cartagena de Indias con las bodegas repletas: el San José llevaría a bordo, según las fuentes, entre 7 y 11 millones de monedas de ocho escudos en oro y plata, por un valor de 105 millones de reales (según los cálculos, entre 2.000 y 5.000 millones de dólares actuales), más otras joyas y riquezas no cuantificadas. Otros cálculos duplican y hasta quintuplican esa cantidad.
La partida
Concluida la feria de Portobelo (Panama) en la primavera de 1708, el conde de Casa Alegre (71 años) José Fernández de Santillán de Sevilla debe dirigirse de a Cartagena de Indias para reparar las naves antes de partir hacia la Habana. Zarpa de Portobelo (Panama) el 28 de mayo de 1708 con 11 mercantes y la escolta de los navíos San José y San Joaquín, un mercante armado, una urca, un patache/o, un aviso y dos fragatas francesas posiblemente al mando de Jean-Baptiste du Casse
Una digresión
La época de huracanes en el Caribe comienza 1ro de junio y se extiende hasta el 30 de noviembre. Resulta interesante ver como podemos darle verosimilitud a la historia, mediante un software reciente. En la parte superior el Huracán Florence con vientos de más de 200 kilómetros por hora y que obligara a evacuar a más de un millón de habitantes en la costa de Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia, más atrás el Isacc por ahora de imprevisibles. Esto deja en claro lo que significa navegar por esa zona durante la época que zarpo este galeón de Portobello. Durante junio y agosto los vientos soplaron del mismo cuadrante este (Los revise al menos 7 veces), por lo que podemos diferir que el periplo del galeón San José en el año 1708, era el único posible, considerando que las fragatas (posteriores) navegaban con un ángulo de viento no menor que los 70/ 80º en ambos bandas, tomando como eje la línea de crujía (Línea imaginaria que, pasando de proa a popa de la embarcación, divide al buque en dos mitades). Los galeones como el San Jose tenían aun menor maniobra relacionada con la ceñida (Angulo navegación contra el viento)
Los protagonistas
José Fernández de Santillán (45 años antes) / Jean-Baptiste du Casse
Comodoro Charles Wager
La historia del Galeón San José, el barco que se hundió con 11 millones de monedas de oro
La flota española llegó a Isla de Barú la tarde del 7 de junio y ancló allí. Al día siguiente hubo muy poco viento, y alrededor de las 3 pm notaron que el escuadrón de Wager se acercaba. Los españoles tomaron posiciones defensivas, pero los ingleses sabían que tenían que atacar a los barcos más grandes, porque tenían la mayor cantidad de dinero a bordo. A las cinco y media de la tarde el “Kingston” comienza su fuego contra la nave almiranta “San Joaquín” de 64 cañones y comandada por Miguel Agustín de Villanueva, mientras Wager busca al “San José” que intercambia fuego con el “Expedition”, que está ya a 300 metros del Galeón San José. Los ingleses quieren abordarlo, por lo que disparan contra su velamen y contra su timón, cuando los ingleses estaban a apenas 60 metros tras dos horas de combate, a las siete y media y ya de noche, el galeón San José estalla y se va a pique, muriendo 589 de los 600 tripulantes, dañando al Expedition y dejando a los ingleses sin enteder que paso con su botín que se cree era de entre 7 a 11 millones de monedas de ocho escudos en oro y plata.
Se salva parte del tesoro
Más tarde el Expedition, el Kingston y el Portland consiguieron rendir al Santa Cruz, que era el que menor cargamento transportaba y ningún tesoro. Otro navío español, la Urca, viéndose sitiada, es incendiado por orden de su capitán antes de ser tomada. Por otro lado, la almiranta San Joaquín consigue llegar a Cartagena burlando a los ingleses y salvando el resto del tesoro.
Infografia con zona del naufragio (cuadrado rojo) / Macuquinas de oro, las cifras
Encuentran el galeón
Diario el Comercio Perú 10.01.2016
El último mensaje sobre el galeón hundido nos llegó el pasado 4 de diciembre vía Twitter. “Gran noticia. ¡Encontramos el galeón San José! Mañana daré los detalles en rueda de prensa desde Cartagena”, escribió entusiasmado el presidente colombiano Juan Manuel Santos en su cuenta de la red social. Y otra vez empezó a crecer la ola: ¿qué cantidad de oro y plata se encuentra sumergida en el mar del Caribe colombiano? ¿Este cuantioso patrimonio puede ser rescatado y usado comercialmente? De darse el caso, ¿a quién o a quiénes les pertenecería el tesoro? Santos ya adelantó opinión: “El pecio [nombre que reciben los restos de un barco hundido] del San José es patrimonio de todos los colombianos y protegerlo debe ser un propósito nacional”. Con esto ha tratado de frenar los reclamos españoles o de otras naciones que podría surgir el San José después de todo era un barco de guerra español y en su carga había patrimonio salido de la actual Bolivia, Perú, Ecuador, Panamá e inclusive México. Más aun porque la prensa internacional se ha apurado en poner ‘precio’ a lo existente: la fortuna bordearía los cinco mil millones de dólares.
Los tesoros que guarda el Galeón San José
El tema del galeón San José es sensible para los colombianos. A inicios de la década de 1980 la compañía estadounidense Sea Search anunció que había descubierto el lugar donde se encontraba sumergida la nave y reclamó para sí los derechos del hallazgo. La respuesta del Gobierno de Colombia no se hizo esperar y el litigio llegó hasta la Corte Federal de Estados Unidos, que recién en el 2011 falló a favor del país sudamericano. Todo esto motivó que en Colombia se alentara y promulgara una norma —la Ley 1675 de Patrimonio Sumergido, aprobada el 2013— que le permite al Estado “proteger, visibilizar y recuperar” toda riqueza subacuática hallada en sus aguas territoriales y “ejercer soberanía y generar conocimiento científico” sobre la misma. En otras palabras, se buscó blindar el San José de apetitos foráneos. Una legislación que, según los especialistas, contraviene la convención de la Unesco del 2001 sobre este tema y que, obviamente, Colombia no ha suscrito.
“La convención de la Unesco es el mejor instrumento para analizar estos casos y lo que dice básicamente es que el patrimonio subacuático es mundial y no de un Estado”, opina el peruano Carlos Ausejo Castillo, antropólogo y magíster en Arqueología Marítima y presidente del Centro Peruano de Arqueología Marítima y Subacuática. “La Unesco no trata de decir de quién es qué, sino qué no se debe hacer. Y lo primero que no se debe hacer es decir ‘vamos a recuperar el oro, la plata y las joyas, y las vamos a vender’. Con lo que se da un manejo comercial del naufragio”, argumenta el especialista.
Las dudas aumentan porque el Gobierno colombiano no ha querido revelar quiénes están detrás de las operaciones de búsqueda. Precisamente, un punto neurálgico de la ley colombiana establece que se podría pagar “hasta con el 50 % de las especies recuperadas que no constituyan patrimonio cultural de la Nación” al contratista encargado de realizar las labores de rescate. La gran pregunta es si las monedas en serie —acuñadas a inicios del siglo XVIII y que estarían sumergidas en el San José— constituyen o no un patrimonio cultural.
Interesante sobre la comercialización del tesoro
Foto submarina con el contorno del San Jose dibujado
Cientos de fotos relacionadas
Las primeras imágenes difundidas por la agencia de noticias EFE no son muy vistosas. Muestran apenas algunos restos que serían cañones, vasijas y pequeños círculos brillantes atrapados en un fango espeso que podrían o no ser monedas de oro. Más allá de esto, la incógnita sobre la magnitud del tesoro hundido se mantiene. La estadounidense Carla Rahn Phillips es autora del libro «Los tesoros de San José» y una de las personas que más conoce acerca de la nave y su funesto destino. Ella declaró recientemente a la agencia española y dejó en claro que “el tesoro es mucho menos valioso de lo que la leyenda propone”. Según sus investigaciones el San José transportaba aquel 8 de junio de 1708 entre “nueve y diez millones de pesos de a ocho reales, incluyendo plata y oro”. Es más, agrega que del total “solo medio millón de pesos pertenecería a la Corona española y el resto sería de fortunas individuales y compañías mercantiles”.
¡Algunas dudas!
Los cañones de las fotografía están demasiado limpios, lo que denota “alguna intervención”. El tipo de cañones deberia ser de hierro y no de bronce. Su forma corresponde a una época anterior. Y lo más notable como duda es: ¿explotó o se hundió como consecuencia del cañoneo ingles? Tal vez lo imprevisto de la misma según relatos ingleses corresponda a una cortina de humo al solo fin de justificar la perdida. Estoy recordando el relato de un navío hundió en las costas uruguayas que se habia perdido el tesoro por culpa del artillero del barco pirata que habia echo un disparo inoportuno y fue enviando con su tesoro al fondo, en castigo fue abandonado en la isla de Flores. Como si fuese poco este hecho sucedió cuando estaba a 50 mts. del abordaje.
Quizás esto confirma las sospechas
Dice la historia El Kingston fue el primer navío en abrir fuego disparando contra el galeón San Joaquín (64) que consigue escapar. Junto al Portland (50), apoya al Expedition (70) en la captura del mercante Santa Cruz (44). El Kingston y el Portland reanudan la búsqueda del San Joaquín al que localizan y cañonean, pero no logran detenerlo antes de que este se refugie en Cartagena de Indias. Bridges y el capitán del Portland serían expulsados de la Armada por su fracaso.
Jueves 9 de Agosto de 2018
Indígenas de Bolivia también reclaman el Galeón San José, uno de los mayores tesoros de la historia
Juan Manuel Santos suspende indefinidamente el rescate del galeón San José
http://www.france24.com/es/20180723-colombia-rescate-galeon-san-jose
¿O habrá sido un acto suicida?
Algunas dudas
Los cañones de las fotografía están demasiado limpios, lo que denota alguna intervención El tipo de cañones deberia ser de hierro y no de bronce Su formas corresponde a una época anterior. Y lo más notable como duda es si exploto o se hundió como consecuencia del cañoneo ingles Tal vez lo imprevisto de la misma según relatos ingleses corresponda a una cortina de humo al solo fin de justificar la perdida. Estoy recordando el relato de un navío hundió en las costas uruguayas que se habia perdido el tesoro por culpa del artillero del barco pirata que habia echo un disparo inoportuno. Y enviando el navío con su tesoro al fondo, en castigo fue abandonado en la isla de Flores. Como si fuese poco esto sucedió cuando estaba a 50 mts., del abordaje ¿O habrá sido un acto suicida?
Jueves 9 de Agosto de 2018
Indígenas de Bolivia también reclaman el Galeón San José, uno de los mayores tesoros de la historia
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http://www.france24.com/es/20180723-colombia-rescate-galeon-san-jose
