Te podés dar una ducha antes de cenar con el mejor champagne francés.

Claro, estas cosas no son de nuestro mundo occidental, sino de ese oriente que por momentos emerge de las Mil y Una Noches. Más concretamente de Emirates Airlines, sin discusión la más lujosa compañía aérea del mundo, lo que no necesariamente coincide con la más exitosa ni con la de mayor tráfico de pasajeros.

Pero en lo que respecta a su primera clase, no tiene comparación. Figura con 143 puntos en la lista de las primeras clases más lujosas, en la archiconocida sección del portal 20minutos.es. (http://listas.20minutos.es/lista/las-primeras-clases-mas-lujosas-de-las-lineas-aereas-311236), pero también encabeza la selección de Forbes y de cualquier otro sitio especializado que se le ocurra calificar. La sigue Singapore Airlines con 138 puntos y hay que reconocer su mérito, pero a Emirates no hay con qué darle.

La primera clase de Singapore se llama Sky Suites y solo hay 12 en cada avión, pues en realidad son suites como si fuera un hotel. ¡Extraordinario!, pero no único, pues Emirates tiene eso y hasta con baño privado.

Andá mirando los comentarios admirados de este periodista que debió sacrificarse para certificar que verdaderamente Emirates tenía un buen servicio. Después dicen que el periodismo no es un apostolado.

Emirates tiene una flota que incluye A380, de dos pisos, a los cuales alhajó con cuatro pasillos para que la gente hasta de la clase turista, no pase incomodidades. El servicio a la carte de primera clase es servido en impecable vajilla de porcelana y acompañado por los mejores vinos. Apoyate en las fotos, porque cualquier descripción con palabras resulta pobre ante la impresionante realidad. Y tené en cuenta que en los otros aparatos la disposición varía, pero el lujo siempre es a tope.

 

Volvamos a la First Class en los A 380. Nada de televisores en miniatura, no señor, Smart TV de 23 pulgadas al lado del barcito individual donde podés servirte los mejores licores del mundo y no pagar con ellos, pues están incluidos en el pasaje. Pedí con tiempo el diario y la revista que quieras leer, en el idioma que se te antoje y, no olvides que si lo solicitás, te van a buscar a tu casa en un BMW, al menos en Londres y ya ahí comienzan a atiborrarte de licores y manjares.

¿Después de la ducha querés un masaje? No problem, también hay spa y si querés socializar con la pobre gente de clase ejecutiva, tenés dos salones que ofician como pubs. ¡Pensar que la compañía comenzó a operar en 1985 con dos aviones alquilados! Pero de ese entonces a ahora, mucho petróleo corrió bajo los oleoductos en Dubai, donde está su centro de operaciones. Emirates tiene una flota compuesta únicamente por aviones de gran tamaño, como el Boeing 777, el Airbus A380 (termina de encargar otros 58), el Airbus A340 y el A330, según informan en la impecable Taringa.

¿Qué hay una crisis planetaria en lo que respecta a las aerolíneas? Andá a saber, Emirates no lo nota y sigue creciendo a un ritmo anual del 25%, porque en tiempos de crisis, las aerolíneas Low Cost pueden ser una respuesta al desafío, pero parece que el lujo infinito también funciona. Lo que equivale a reconocer, malgré la situación financiera, que también se incrementa la distancia entre los que tienen muy poco y los que tienen tanto que asusta. Tanta diferencia da un poco de asco. ¿No te digo que esto te hace recordar a Las Mil y Una Noches? En fin, también podrías desear que todos fuéramos pobres, pero ¿no te parece un poco patético?

Ahora, si querés pegarte un susto sin confiar en lo que te cuente Sherezade, consultá los precios de la primera clase en http://www.emirates.com/

Guillermo Pérez Rossel