Parece una ciudad inventada por un editor de postales o un poema épico arquitectónico como la califica una entusiasta calificadora de Ciao.es.
La cárcel más lujosa del mundo quizás tenga un defecto: aumenta el delito.
Publicada la entrada de ayer, me mandan esta otra isla disparatada. Capaz que son comunes en países donde no sufren nuestras sudestadas.
Es cierto que hay un campeonato mundial, pero lo que más justifica a este artículo es el descacharrante video de Laurel y Hardy.
Arrancar en auto desde Pisa o desde Florencia y saborear la Toscana en el verano de ellos, sin apuro y sin límites económicos. Nada más placentero puede imaginarse.