Un semejante peñasco de más de 200 metros de altura le provoca al hombre una excitación irresistible: hay que treparlo sea como sea y mirar el mundo desde ahí arriba.

Pero no es como nuestro Pan de Azúcar o el de Río de Janeiro, también de una sola pieza… no señor, este parecía inexpugnable hasta que un cura puso la escalada como un deber dominical. Entonces apareció un “paisa” con la convicción suficiente para excitar a dos amigos. Entre los tres llegaron a la cima y plantaron bandera… o más bien camiseta. Porque el entusiasmo no daba para volver al suelo y subir la bandera que olvidaron llevar… quizás por falta de experiencia.

Toda esta efervescencia comenzó en 1954, antes de eso, el “Peñon de Guatapé” era mirado como un estorbo por los vecinos, casi todos agricultores que iban a misa a regañadientes. Al cura Alfonso Montoya, párroco de Guatapé, se le ocurre desafiar con una escalada a sus fieles. Bastó que en misa dijera que “los sapos no suben a las piedras” para que entre los fieles apareciera un escalador y dos compinches. Era Luis Eduardo Villegas, a quien siguieron  Ramón Díaz y Pedro Nel Ramírez. Estudiaron el asunto, hicieron unos atados con agua y comida e iniciaron una trepada que ¡les llevó cinco días!

Era el 16 de julio de 1954 y el pueblo entero estaba debajo, convencido de que no lo iban a lograr. Por eso la camisa izada en la cumbre fue festejada con aplausos tan estruendosos que despertaron al mismísimo Satanás, si nos atenemos a las leyendas populares. El demonio se enojó tanto que, aunque antes había fracasado, intentó nuevamente llevarse la piedra para el infierno. Tampoco lo logró esta vez, y como prueba de que esta tradición no es otra habladuría pueblerina, en el esfuerzo por arrancarla del suelo, le produjo una profunda rajadura en el lado occidental, donde se junta con la tierra firme. Entonces, cuando algún sabihondo se burla de la historia, le muestran la quebradura como prueba convincente.

Hacé la prueba y escuchá sus argumentos, no porque si te hablan mucho te puedan convencer, sino porque los “paisas” (ese es su inefable gentilicio) hablan con un español adorable. Son nuestros primos hermanos. Ellos son una rareza como lo somos nosotros, que pronunciamos la “Y” como el “Je suis” de los franceses, según el lugar en que esté dentro de la palabra. ¿Alguna vez vieron a un rioplatense pidiendo un tecito de “iuios”, o trancándose en una interminable “iii” para referirse a nuestra calle (caye, no caie) Yi?

Pues bien no es lo único entrañable que tienen los “paisas”, donde también usan el “voseo” con tanto énfasis como Gardel, que murió por allí, en el aeropuerto de Medellín, la ciudad más poblada de la región “paisa”, casi enteramente coincidente con los departamentos donde se escucha el voseo: Antioquia, Caldas, Risaralda, Quindío, en el departamento de Valle del Cauca (especialmente en la ciudad de Cali) y al nororiente del país, en el occidente de Norte de Santander (provincia de Ocaña), sur de Bolívar y sur del Cesar. En la Costa Caribe es usado el tuteo y en el resto de Colombia predomina el ustedeo… que también es una costumbre nuestra, en lugar de “vosotros”.

La primera vez que fui a Medellín, en el mismo aeropuerto me recibió Gardel por los parlantes. Se escucha más tango que acá y podés hacer papelones si te ponés a presumir con Troilo o lo que sea. Ellos son tanto o más tangueros que nosotros, y no desde el accidente que le costó la vida a Gardel sino de bastante antes. Emociona todo eso. Así que mientras escalás, que no te asombren las voces de ánimo que parecen salidas del barrio Aires Puros.

En fin, todo indica que el Peñón le pertenece a la municipalidad… o a la iglesia en el caso de que en algún momento haya sido donado.  Pero en los hechos, la que recauda es la familia Villegas, que quizás reparta con la iglesia o con el Municipio de Guatapé, pero no nos consta. Dicen las fuentes que “varias escalas de madera le sucedieron antes de las seguras escalas de concreto que posee en la actualidad, con doble vía, una para subir y otra para bajar. En un futuro, llegará a poseer un moderno teleférico, lo que posibilita el ascenso a más personas, incluso aquellas que poseen alguna discapacidad”. Pero, claro, el romanticismo se habrá ido al diablo.

El peñón, o peñol según ellos, está en Guatapé rodeado de pueblitos adorables. Desde Medellín podés tomar un paseo por el día que te costará módicos 30 dólares e incluye el almuerzo, además del traslado. Son unas dos horas de viaje que no deben contar como tiempo perdido, pues la campiña es realmente hermosa. Si vas por las tuyas, o tomando un autobús (10 dólares) en Medellín, deberás abonar 6 dólares para ascender los 200 metros y pisar jadeando los 740 escalones que te separan de la cima. El vértigo corre por cuenta tuya. Una persona sin mucho entrenamiento, completa la subida en unos 45 minutos. Y no te quejes, porque sin el aliciente del paisaje, el caminador que compraste te insume tanto o más tiempo con la promesa de un adelgazamiento que no llega.

¿Y arriba qué hay? Primero hay una hermosa vista de la “laguna del Peñol” que rodea la piedra; pero además, la familia Villegas, a la que pertenece el capitán de los primeros escaladores, instaló puestos de venta de comidas y souvenirs. ¿Entonces Villegas obtuvo la propiedad o la concesión solo con animarse a subir? No consta que sea dueño de nada, pero nadie le reclama nada tampoco, quizás porque contribuye con la comunidad, quizás porque allí no se arremete contra cualquiera que encuentre una manera de ganar dinero, como ocurre acá.

No tenés que conformarte con lo que encontrarás en la cima. En Guatapé hay bastantes restaurantes de comida típica gracias al flujo de turistas que produjo Villegas. Antes de partir hacia el pueblito, decidí si te gustaría hacer un paseo de una hora por la laguna al costo de 6 dólares. Todo es bastante económico por acá. También podés practicar canopy o jetski, pero lo más apasionante son las comidas y dulces tradicionales de la región.

Recomiendan entrarle a la tradicional bandeja paisa y el ajiaco. Cuando recuperes el aliento, podés darle una probadita al arequipe, aunque solo sea para descubrir que contrariando lo que dicen los tontos, el dulce de leche no es exclusivo del Río de la Plata. También hay bocaditos de guayaba y maní.  La “bandeja paisa” merece una referencia. Es casi inevitable que la pruebes en Guatapé, aprovechando que las dos horas de viaje de regreso a Medellín te ayudarán a digerir el sacudón de lípidos, proteínas y –sobre todo- picantes. Se sirve en bandeja porque en un plato no cabe por grande que sea. Es enormeee. Se compone de esa carne desmechada tan particular no solo de Colombia sino también de Venezuela, morcilla, arroz, fríjoles rojos, plátano maduro, carne molida chicharrón, huevo frito, chorizo, aguacate, arepa, hogao, guiso. Salís redondo, es una promesa.

Si nadie te apresura, podrías aprovechar para darle una vueltita al pueblo en una motochiva, que es la versión miniaturizada de las célebres “chivas” paisas, el más colorinche, simpático y divertido autobús de la región. Sería la manera más razonable de recorrer el  municipio y contemplar los zócalos multicolores y multiformes.

A propósito de la ornamentación exquisitamente kitsch, naturalmente creada y cuidada por los vecinos, te sugiero una disquisición personalizada. Imaginate la reacción de estos paisas si en su ciudad aparece uno de los malditos enchastradores de paredes que tenemos por acá. Y no me refiero a los que derraman creatividad, sino a los malhechores que casi terminan con el monumento al gaucho, que destruyen oprobiosamente el frente de la Biblioteca Nacional… en fin, seguro que sabés de qué te hablo. Pues bien, solo me queda una duda, si los paisas lo agarran a patadas o lo fríen  como a los ingredientes de la bandeja paisa.

Guillermo Pérez Rossel

Para enumerar las cosas que podés hacer en Antoquía, recopilaré lo que escriben y muestran en https://alkilautos.com/blog/general/pueblos-mas-lindos-de-antioquia/. Es una rentadora de autos que, naturalmente, te invita a recorrer todo en uno de sus vehículos.

Encabeza con una bella foto de la laguna que tendrás a tus pies cuando trepes al peñón. De manera que me ahorro la descripción tanto de la laguna, como de la roca. Dice que son 120 municipios que tienen lo suyo, pero se centra en 5, aunque para nosotros serán solo cuatro. Los tiempos son en auto y desde Medellín.

1. Jardín: Ubicado en el suroeste de Antioquia, a 134 km de Medellín. Hace parte de los pueblos Patrimonio de Colombia; lo que llama más la atención es su parque principal adornado con jardines de rosas que reciben a los viajeros. El piso de piedra y la arquitectura colorida son los principales atractivos del pueblo, ideal para caminar y dejarse encantar de la magia de este lugar. De Medellín a Jardín hay menos de 3 horas.

Ruta para Jardín:  https://goo.gl/M9glfT

2. Santafe de Antioquia: Ubicado en el occidente de Antioquia, a 56 km de Medellín. También hace parte de los pueblos Patrimonio de Colombia, se destaca por sus hermosas calles de piedra y la arquitectura colonial que cuentan la historia de esta, la primera capital del departamento antioqueño. Allí puedes atravesar el río Cauca sobre el Puente Colgante de Occidente. De Medellín a Santafe de Antioquia hay 1 hora y 10 minutos.

Ruta para Santafé de Antioquia: https://goo.gl/U8ln8v

3. Sonsón: Ubicado al sur de Antioquia, a 106 Km de Medellín. Posee todos los pisos térmicos y un páramo.  Su riqueza patrimonial está representada en su centro histórico que aún se conserva, así como museos y varios centros culturales que preservan la historia del lugar. De Medellín a Sonsón hay 2 horas y 50 minutos.

Ruta para Sonsón: https://goo.gl/WN1wZO

5. Jericó: Localizado en el suroeste de Antioquia, a 104 Km de Medellín. Hace parte de los Pueblos Patrimonio de Colombia, justificado por los hermosos paisajes que se ven con sus montañas y por las tradiciones como la fabricación del carriel antioqueño, símbolo de la región. Este pueblo se ha hecho más popular porque de allí era oriunda la Madre Laura Montoya, canonizada en 2013, puedes visitar su casa natal.  De Jericó a Medellín hay 2 horas y 40 minutos.

Ruta para Jericó:  https://goo.gl/Kb4GiU