¿Y para qué querría alguien una cama que hace de todo? Bueno, no todo todo lo que se puede hacer en una cama.

Lo que pasa que los fabricantes (http://www.somnus-neu.com/ ) tomaron conocimiento de una investigación de mercado realizada para Samsung sobre 1.000 viajeros (de negocios) y resultó que un 57% nunca abandonaron sus hoteles. Peor todavía: uno de cada cuatro ni siquiera salió de la habitación, como si fueran parejas en luna de miel como las de antes, cuando todo podía ocurrir, pero primero la libreta.

Por el precio (que no lo indican) es una cama para que los hoteles la pongan a disposición de huéspedes que la pidan. Y créanlo o no, hay varias cadenas que las están comprando por decenas.

Para empezar su nombre, “Somnus-Neu” es el nombre del dios romano del sueño y la palabra alemana para definir lo nuevo. Pero “nuevo” es poco adjetivo para semejante cama, de la cual un viajero profesional ni siquiera tiene que bajarse para elaborar informes sobre sus reuniones, que puede realizar hasta en su propia habitación. ¡Tanto esfuerzo para no conocer las ciudades donde uno viaja! Mirá que hay gente loca…

La cama tiene conexión a internet, faltaba más, sistema de audio y video, pantalla para ver televisión, así como un comando central que gobierna todo, incluyendo las cortinas que caen púdicamente para que la limpiadora proceda sin ruborizarse, para el caso de que el personal de un hotel todavía tenga cosas que no haya visto.

Además, dos monitores retráctiles de 17 pulgadas, por si tenés ganas de navegar de este lado o de este otro. O por si invitaste a alguien para compartir el lecho y como sos un tipo serio, cada uno hace sus cosas por internet y no se le ocurren conductas pecaminosas en semejante cama.

Posee conexión a internet , sistema de audio y de video , una pantalla que se oculta al presionar de un botón y cortinas automáticas que se abren para ayudarnos a despertar y se cierran cuando ha terminado el día. Todas las funciones se llevan a cabo a través de un comando de datos que se encuentra en dos pantallas retráctiles de 17 pulgadas y que son sensibles al tacto. A través de éstas se acceden a páginas web que ofrecen llevar el control de la agenda, citas, contactos y notas.

Dicen que lo más espectacular es que luego de programarla para que la cama haga todo lo que vos quieras (todo no, ya te lo expliqué), los datos pueden ser guardados en una tarjeta para que la cadena hotelera te reserve una cama igualita a esa y con todos tus caprichos, en la siguiente ciudad a la que vayas con el propósito de no conocerla ¡qué cosa contigo! A esa preciosura la denominan radio frecuency identification (RFI) y la tarjeta también te la podés guardar para no andar con el fastidio de andar programando la cama cada vez que llegás a algún lado.

¿Y si se te da la gana de otra cosa? Bueno, podés improvisar escogiendo la música y los juegos de luces como si estuvieras en una Disco.  Eso sí, al compañero/a de lecho te lo tenés que conseguir vos, aunque ayudan  el teléfono adosado a la cama y algunas webs especializadas.

¡Ah! También se puede dormir en esta cama.