Argentina pasada por agua
No te vayas a olvidar de nuestros ríos, pero Argentina tiene de todo para los deportes acuáticos.Es que somos países complementarios, tenemos mucha suerte, mal que les pese a todos los que quieran separarnos. La Agencia Tur de noticias turísticas, una joyita de la industria argentina del turismo, nos nutre con mucho material, más del que podemos recoger sin que nos critiquen por relegar lo nuestro a segundo plano. Esta vez escogimos este abanico de posibilidades acuáticas.
Dice la agencia que los innumerables ríos, embalses y lagos argentinos invitan de norte a sur a vivir las más atractivas aventuras. Desde los saltos más desafiantes para hacer rafting, hasta la posibilidad de explorar la naturaleza a través de un tranquilo kayak de travesía. La zona cordillerana es la más elegida. Precios accesibles y guías especializados.
Cada vez son más las actividades diferentes que pueden realizarse en el agua. Con remo, vela o simplemente una tabla la imaginación despierta las más creativas posibilidades. Y para saber lo que se siente, es necesario vivir la experiencia en primera persona. Algunas de éstas pueden relajar el alma, alimentar las retinas y llenar los pulmones de aire puro, otras más desafiantes generan sensaciones de vértigo y adrenalina. En la Argentina existe una gran cantidad de escenarios donde llevar adelante estas propuestas para las que sólo será necesario un profesional capacitado y un buen equipo de seguridad.
La cuota de diversión y entretenimiento estará así garantizada en su escapada de fin de semana o largas vacaciones. Para los más atrevidos, el deporte recomendado es el rafting con diversos niveles de dificultad dependiendo de la bajada del río. Incluso, suelen plantearse desafíos extremos y en lugar de usar el habitual gomón o balsa, se hace en un kayak que debe mantenerse en equilibro entre los innumerables rápidos y piedras que puedan cruzarse en el camino.
Saltos del Moconá
Diferentes variantes
Otra de las posibilidades para disfrutar paisajes desde el agua es el kayak de travesía, donde con remo en mano podrá desandar un apacible camino alrededor de encantadores lugares como la Laguna de Chascomús, en Buenos Aires; el Dique Cuesta Blanca, en Córdoba; y, los ríos Paraná y Uruguay, en Entre Ríos. Muchos ávidos de estos deportes también eligen el canotaje, ideal para hacer en los Saltos de Moconá, provincia de Misiones; en el Golfo Nuevo de Puerto Madryn, Chubut; la Cascada de los Alerces en Bariloche, Río Negro; y, el Estrecho de Magallanes o el Canal de Beagle, en Tierra del Fuego.
Durante la temporada estival es muy común ver en las playas de la Costa Atlántica surfistas barrenando olas, ya sea en Mar del Plata, Pinamar o Necochea; así como en Villa Carlos Paz, Córdoba y Paso de la Patria, Corrientes. Otras de las variantes que en algunos lugares ventosos se practica todo el año es el windsurf cuya dirección se maneja a vela. En la zona de la Patagonia, la propuesta náutica incluye el kitesurf el cual permite dar intensos saltos con una tabla y un parapente. En el Tigre, a minutos de la Ciudad de Buenos Aires se practica yachting, esquí acuático, regatas, motonáutica y wakeboard.
Cascada de los Alerces
Los preferidos
Los ríos de los Parque Nacionales suelen ser escenarios ideales para recorrer en kayak, por las largas distancias que proponen en un entorno de absoluta pureza, ya que no son navegados por embarcaciones a motor. Uno de los favoritos es el río Limay, dentro del Parque Nacional Nahuel Huapi, que constituye una buena alternativa para los que recién se inician tanto en el kayakismo, como en canoas abiertas y flotadas en balsas. El río Azul, en El Bolsón es uno de los de más alto nivel de peligrosidad, sólo para experimentados.
Para nivel intermedio, de mayo a diciembre, la confluencia del río Traful y el Arroyo Minero, aseguran un buen descenso. En primavera, las miradas se concentran en el río Hua Hum cerca de San Martín de los Andes, donde se realiza el Campeonato Argentino de Kayak. Y entre los mejores de América Latina para el rafting es el Río Mendoza con sus turbulentas aguas que bajan de los Andes, asegurando un trayecto lleno de diversión y emoción.
Termas de Cacheuta, en Mendoza
La magia de los ríos blancos
Las tierras cuyanas son ideales para vivir extremas aventuras por su especial topografía que hace que los cursos de agua sean los más buscados para hacer descensos entre abundante espuma blanquecina. La infraestructura existente permite desde áreas para quienes dan sus primeros pasos hasta lugares con dificultad VI que es la más alta, por las turbulencias y olas de hasta un metro.
Una de las bases que concentra más presencia de turistas es Blanco Encalada, a unos 25 kilómetros de la ciudad Capital de Mendoza por el camino que lleva hasta las termas de Cacheuta. Allí, hay cabañas para hospedarse, restaurante, piscina y solarium para vivir una jornada inolvidable. Las actividades no solamente son en el agua, sino que también se puede combinar trecking, rappel, mountain bike y cabalgatas. Hay paquetes de dos días desde U$S 175 y otros de cuatro por U$S 325.
El paseo más corto es de cinco kilómetros, por una tarifa de U$S 23 con transfer incluido. El intermedio requiere una edad mínima de 12 por ser más dificultoso y el valor es de U$S 30. Y la salida de día completo propone dos bajadas de casi tres horas en total, con un almuerzo intermedio desde U$S 60 más la comida. La excursión de kayak requiere experiencia desde U$S 38, la de kayak inflable doble que es más fácil desde U$S 30, y la de hydrospeed con una tabla corta y patas de rana, entre las más vistosas.
Otro de los sitios más recomendados de Mendoza es el Cañón del Atuel, a unos pocos kilómetros de San Rafael, donde hay empresas que ofrecen servicios para distintos tipos de recorridos. El más corto es de seis kilómetros y el más largo de 16. Los valores rondan entre U$S 12 y U$S 20, más el traslado. Y la provincia de Salta nada tiene que envidiarle, con el Cañón del río Juramento donde combinar rafting con canopy entre los árboles por una tarifa individual de U$S 73.
Rafting en El Manso, Bariloche
La intrépida Patagonia
En el Camino de los Siete Lagos hay alternativas para navegar en un entorno mágico y de total tranquilidad. Pero es importante tener en cuenta que en la zona de Parques Nacionales hay áreas delimitadas para practicar deportes náuticos y las embarcaciones deben estar habilitadas ante la Prefectura Naval Argentina. Las salidas nocturnas están restringidas y no está autorizado el uso de motos de agua. Una de los sitios más habituales para hacer rafting en Bariloche es el Manso, en dirección a los lagos Gutiérrez, Mascardi y Guillelmo, donde las empresas suelen ofrecer una excursión con guía, traslados y equipamiento, más un opcional de merienda, desde U$S 60. Otro circuito más largo llega hasta el límite con Chile y al regreso invita a una entrada de ahumados y un asado típico patagónico desde U$S 100.
Río Azul, remansos para pescar y torrentes para los audaces.
Datos útiles
* En Mendoza: Betancourt Rafting SA, con base en Blanco Encalada. Tel.: (0261) 4299665. E-mail: info@betancourt.com.ar. Atuel Travel, en San Rafael. Tel.: (02627) 429282. E-Mail: turismo@atueltravel.com.ar. Web: www.atueltravel.com.ar.
* En Salta: Salta Rafting, Caseros 177. Tel.: (0387) 4213216. E Mail: info@saltarafting.com.
* En Bariloche: Adventure, Morales 362. E-mail: patagonia@raftingadventure.com.
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