No te veo pedaleando desnuda por la Avenida Garzón, aunque asegures que estás protestando.

Pero si lo hicieras en Londres, Amsterdam o aún en Madrid o Valladolid, enojadísima con el «recalentamiento global» no te digo que pasarías desapercibida, pero por lo menos disimulada en un montón de gente. Por otra parte, es una excitante manera de viajar por el mundo sin cargar una fastidiosa valija.

Desde el 2004, la World Naked Bike Ride, reclama contra la contaminación y contra los autos desnudándose en gran cantidad de ciudades del mundo, todas ellas menos pacatas que Montevideo. Contra la idea que uno tiene de la «flema» británica, la manifestación de Londres fue una de las que más ciclistas concitó, pero en el 2010 no le quedó a la zaga Madrid, o Valladolid donde también hubo una marcha que celebró nada menos que el conservador ABC. Ahora los entusiasmos están un poco apagados, pero aseguran que habrá nuevas movilizaciones.

Los reclamantes sostienen que cerca de un millón de especies de plantas y animales podrían desaparecer en los próximos 50 años como consecuencia de los gases que provocan el efecto invernadero y que, en su mayoría, provienen de vehículos alimentados con hidrocarburos.
Ciertamente, a algunos les queda chico este móvil y también manifiestan contra el cigarrillo o contra cualquier otra cosa, la cuestión es desnudarse, cosa que es muy bienvenida en algunos casos y en otros da sólidos argumentos contra los manifestantes. Pero ¡qué se le va a hacer! Se desnuda el que quiere y no el que debería hacerlo, aunque el saldo suele ser positivo.

Solo falta que los sindicatos textiles se desnuden en protesta contra la tendencia universal a despojarse de la ropa. La culpa la tienen ellos, pues los constantes cambios de la moda y los precios de la vestimenta ya en nuestras playas ha ocasionado que las mallas de las chicas sean cada vez más pequeñas, un hilito en algunos casos.

Sus argumentos. «Nos desnudamos para mostrar nuestra fragilidad ante el tráfico y recordar a los conductores que piensen en los ciclistas», defendió uno de los participantes en la iniciativa que empezó a utilizar la bicicleta en Madrid «para estar en forma». Así lo relata el ABC de Madrid, el  cual agrega que aunque los ciclonudistas reconocieron que ahora es más fácil y hay más ciclistas en Madrid,  todavía «falta muchísimo», como más carriles-bici, más concienciación y un horario de Cercanías y Metro más amplio.

Las calles de Valladolid también se llenaron de bicicletas con el lema «Desnudos ante el tráfico. Justicia en las calles», con el que además de denunciar «la agresividad» de algunos conductores, la marcha, que comenzó con una concentración previa en la Plaza Mayor, también ha reclamado a la Administración mayor apoyo a la bicicleta como medio de transporte urbano.

«Un coche menos» rezaba alguna de las camisetas de los ciclistas antes de desnudarse, mientras los primeros curiosos se acercaban para ver como unos a otros los participantes pintaban sus cuerpos al descubierto, pese al tiempo fresco y la amenaza de lluvia.
La marcha ha recordado que aunque mejore la movilidad en bicicleta por algunas ciudades, en el caso de Valladolid con más carriles y puestos de aparcamiento reservados para bicis, todavía queda mucho por hacer, tanto en el diseño urbano como en el respeto de algunos conductores hacia ciclistas y peatones.

Menos expansivos fueron los ciclonudistas de Londres o Alemania, que salvo excepciones, se limitaron a despojarse de sus ropas con alegría aprovechando el calorcito y comenzaron a «darle pedal a la vida». ¿La policía? Impertérrita, como corresponde en esas latitudes. Un poco más informal fueron los ciclistas holandeses, que hicieron circular la imagen que reproducimos y que podría considerarse un afiche. Con una invitación así, ¿quién puede negarse? Y que conste que ni las estrellitas ni las pudorosas rayitas las pusimos nosotros, que con Tinelli aprendimos a convivir con la desnudez, entre otras cosas. ¡Vade retro Satanás!

Y miren los argumentos que colgaron en internet: ¿Por qué en bicicleta? La bicicleta es un medio de transporte urbano solvente, saludable, ecológico y divertido. Es un icono, un símbolo de libertad y un instrumento práctico de transformación social. No paga tributos, no gasta petróleo, no colabora con el desarrollismo destructor ni con la guerra global.

¿Por qué desnudas? Porque nos sentimos desnudos ante el tráfico por la falta de respeto de los conductores y la desidia de los gobernantes. Con la desnudez hacemos visible la fragilidad de nuestras «carrocerías» (nuestro propio cuerpo). Además, mostramos nuestro cuerpo con naturalidad, rompiendo el pudor, desmontando tabúes respecto a nuestro físico impuestos por la moda y la avaricia de la industria transnacional textil. En definitiva, nos enfrentamos al tráfico urbano con el cuerpo desnudo sobre la bicicleta como la mejor forma de defender nuestra dignidad y de vivir la lucha social.

En los links, una increíble panorámica y algunas url para informarse un poco más, para el caso de que te dé por ahí.
http://www.panoramas.dk/2008/flash/naked-bike-ride.html
http://en.wikipedia.org/wiki/World_Naked_Bike_Ride