Esta vez nuestro corresponsal arriesga y rescata a un pintor poco mencionado. No es que arremeta contra los que saben, sino que pone en juego la libertad de apreciación. Además, los entendidos no lo ignoran, es uno el que cae una y otra vez en la rutina de lo más conocido.

Por Alberto Moroy

No soy artista y menos aún, crítico de arte. Así que como neófito solo valoro lo que me llama la atención, aunque no sea el arte más apreciado por los entendidos.  En este caso me parece un regodeo lo que vi de este pintor ruso de padre y madre francesa.  Se llamaba Jean Georges Beraud catalogado como Neoclasicista y Romántico. Pintó la vida parisina durante la Belle Époque. En la portada una de sus obras; El comerciante de juguetes; realizada en 188

La llegada a Marsella 1880

A la muerte de su padre, la Sra. Béraud regresó a Francia acompañada por sus cuatro hijos, y se instaló en París. En 1872 decidió acudir a las clases de Léon Bonnat, uno de los artistas más influyentes del momento, ocupando un taller en el barrio de Montmartre. Al año siguiente deja el taller para exponer en El Salón, la gran cita anual del arte. Sus primeros temas son retratos de hombres, mujeres y niños.

Rue du Havre, circa 1882

El entierro de Víctor Hugo 1885

En 1886 fallece su madre en París. Al año siguiente, fue nombrado caballero de la Legión de Honor. Expone cada vez más a menudo afuera, en el Círculo de la Unión artística, en la Sociedad de acuarelistas francesa, en la Exposición Universal de 1889. Muy activo en el medio del arte, participó en 1890 a la creación de la Sociedad Nacional de las Bellas Artes, en compañía de Rodin, Meissonier y Puvis de Chavannes.

Salida de Misa 1887

Pâtisserie Gloppe (1889),

En Béraud lo importante no son los personajes que llenan sus calles y bulevares, sino éstos, los primeros son figurantes, la decoración de las calles, las tiendas, los teatros. Porque en Béraud más que un pintor nos encontramos con un retratista; y esa precisión en el retrato la debió de conseguir a base de hacer muchas fotografías de París. Sus imágenes son una bellísima aportación colorista al paisaje de la urbe que despliega en cada cuadro, y sin importar si es invierno, otoño, verano o primavera, la vida en París está protagonizada por un ambiente que invita al placer y al más que esplendoroso paseo por sus calles, todo ello tratado con el máximo detalle, tanto en la arquitectura de los edificios, como en las formas de un carruaje. Es como si, en un momento determinado, por un instante la Naturaleza de la ciudad hubiera quedado congelada, para gusto eterno del espectador.

Continúa…

https://purakastiga.blogspot.com/2015/05/jean-beraud-el-paisaje-urbano.html

Hoy en día, gran parte de sus obras se han ido a colecciones privadas de todo el mundo, pero si quieres descubrir las pinturas de Jean Béraud en París, debes saber que el museo Carnavalet y el Musée d ‘ Orsay son las instituciones que tienen más obras de las que él es autor. Mientras tanto, te dejamos descubrir algunas obras importantes de este pintor de la Belle Époque.

Rue de Richelieu bajo la lluvia (1884?)

Pont des Arts, conocido como Día de viento» 1880

Jean Béraud también es un maestro en el arte de representar los lugares más emblemáticos  de la capital: los teatros de los Grands Boulevards, los nuevos parques y jardines erigidos como parte de las obras haussmannianas, los muelles del Sena, las pequeñas tiendas de la calle del Viejo París, los monumentos de la época (El Palais Garnier, la Colonne de la Bastille,…). Todos estos lugares están retratados con una precisión y una agudeza asombrosa que se encuentran en pocos artistas de su tiempo.

Jean Georges Beraud: A collection of 160 paintings (HD)

Falleció el 4 de octubre de 1935 en su domicilio parisiense y fue enterrado en el cementerio de Montparnasse. A partir del año siguiente, el Museo Carnavalet le rindió homenaje

Musée Carnavalet, l’histoire de Paris (Full HD)